El Asesino de Florencia Torrente

Carlos Elder, Charlie Elder, el paisajista, el rugbier de San Albano, acababa de asesinar a Araceli González (1). Hacía apenas un rato, la había estrangulado y le había tirado un Queso. Se encontraba en algún lugar de la Provincia de Córdoba. Dicen que cuando salió de la escena del crimen contempló el cielo. Las constelaciones brillaban en su esplendor. La Cruz del Sur, las Tres Marías, el gran cinturón de Orión, Jupiter brillante, Saturno en su plenitud. Y tras mirar el cielo, miró a su alrededor, y vio asombrado que se acercaba hacia el, nada más ni nada menos que Florencia Torrente, la hija de Araceli González. - Noche perfecta para seguir quesoneando – pensó Carlos Elder mientras observaba a la hija de su víctima – Una Florencia, como Vigna, Raggi o Etcheves. No fue Carlos quien se acercó a Torrente, sino al revés, fue ella quien se acercó al rugbier. - Buenas noches – le dijo Torrente a Carlos - ¿Sabe donde esta el Hotel Venus? - Vengo de allí precisamente ...