El Asesino de Malena Sanchez

Ocurrió la misma noche en que Carlos Eisler asesinó a Delfina Chaves (1), cuando aún la noticia de ese asesinato no se había difundido. Malena Sánchez, la actriz que interpreta a Francesca Moretti en “Argentina, Tierra de Amor y Venganza”, regresó a su departamento, despues de un intenso día de grabación de la exitosa serie de Canal 13. 

Tenía ganas de ir a cenar con unos amigos aquella noche, pero realmente estaba muy cansada, demasiado cansada, más de lo habitual, por lo pronto, iba a tirarse un poco, y despues a fumar un porro, a ver si con eso lograba la energía necesaria para concurrir a la cena programada, si el porro no servía, recurriría a alguna droga más fuerte de ser necesario.

La actriz se tiró a la cama, y empezó a fumar un porro. Le gustó mucho, se fumó otro, y otro, ya eran tres, ella sola, sin compartir ninguno, estaba volada, se sentía bien, y ya tenía ganas de ir a la cena con esos amigos. Se levantó de la cama, y de repente, como salido de la nada, vio que sobre la cama, había un Queso gigante.

Sí, un Queso, del cual se destacaban sus agujeros grandes y voluminosos, un Queso Emmenthal, realmente colosal…

- ¡Qué fumada estoy! ¡Veo Quesos imaginarios! ¡Ja, ja, ja! ¡Qué divertido!

Convencida de estar viendo alucionaciones, y al mismo tiempo, contenta por ello, Malena se metió al baño, al salir, vio que junto al Queso había un par de zapatillas muy gigantescas, de un tamaño colosal.

- ¡Qué zapatillas grandes! ¡Como las de esos negros que juegan al básquet en Estados Unidos! ¡Que fumada estoy!

Pero la actriz, se sorprendió al tocar tanto el Queso como las zapatillas. Aquello no era una alucinación, era verdad…

- ¡Qué efecto tienen esos porros! ¡Hasta parece que las alucinaciones se pueden tocar! ¡Me fumo otro!

Empezó a fumar otro, y tanta satisfacción le dio, que se fumó otro… De repente, sobre su rostro, había un pie, sí, un pie de hombre, de un tamaño colosal, muy oloroso, un pie gigantesco, digno de un gigante, y con un olor a Queso que apestaba de una manera increíble de contar.

- ¡Qué olor a Queso! – dijo Malena Sánchez. A continuación empezó a oler, besar, chupar y lamer aquel pie, que era un pie izquierdo, despues fue un pie derecho.

Dentro del delirio que tenía producto de la media docena de porros que había fumado, Malena se dio vuelta, y notó que un enorme pie, esos mismos pies, la penetraban por el culo, le encantó, le dio mucho placer, y entonces se fumó otro porro (se ve que tenía reservas de sobra, que los porros y las drogas se conseguían muy bien en Argentina Tierra de Amor y Venganza), y mientras fumaba aquel porro, sintió que la estaban cogiendo, ahora por la concha, le estaban metiendo un pene de tamaño colosal, como aquellos pies, la actriz lo disfrutó de una manera imposible de describir, mientras cogía veía a su alrededor, a jugadores de la NBA, como si Charles Barkley, Karl Malone, Carlos Boozer, Charlie Villanueva y el legendario Carlos Delfino, de la generación dorada, la estaban cogiendo, en medio de un estadio de la NBA, en medio de los gritos de la multitud, que la vivaban con porristas y todo.

De repente, en medio de aquel goce imposible de describir, sintió un pinchazo…

- ¡Ayyyyyyyyyyyyyyyy! – gritó Malena Sanchez, como volviendo en sí, como si de golpe, el efecto de las drogas desapareciese por arte de magia.

Para su sorpresa, ante ella, estaba Carlos Delfino, sí Carlos Delfino, el basquetbolista de la generación dorada, oro en Atenas 2004, bronce en Beijing 2008, el Basquetbolista Asesino, el asesino de muchas mujeres, de Valeria Mazza, por ejemplo, o de Jazmín Stuart y Dolores Fonzi, por citar víctimas conocidas por Malena Sanchez.

- ¿Qué significa esto? ¿Quién sos?

- Me gusta asesinarlas cuando están conscientes, si no, no tiene gracia, ja, ja- río el asesino y añadió - Nunca confíes en un asesino y menos si ese asesino se llama Carlos Delfino – le dijo el basquetbolista a la actriz.

A continuación, la tomó del cuello, puso el cuchillo a la altura del pescuezo de la chica, y raaaaaajjjjjjjjjjjjjj se lo cortó, la sangre se esparció por todos lados, el degollamiento fue tan siniestro como macabro y brillante.

- Queso – dijo Carlos Delfino tirando el Queso sobre el degollado cadáver de Malena Sanchez.

Y el asesino se alejó de la escena del crimen… con tanta impunidad como había llegado. Así fue asesinada Malena Sanchez, por Carlos Delfino, el Basquetbolista Asesino.

(1) El Asesino de Delfina Chaves