El Asesino de Mercedes Funes
Ocurrió la misma noche en que Carlos Eisler asesinó a Delfina Chaves (1), cuando aún la noticia de ese asesinato no se había difundido. Mercedes Funes, la actriz que hace de Alicia, la malvada hermana de Torcuato Ferreyra en “Argentina Tierra de Amor y Venganza”, finalizo su jornada de grabación, muy extenuada y con un cansancio mayor al habitual.
- Hoy sí no me queda nada de carga en mi batería personal – murmuró Mercedes Funes, mirándose al espejo.
- Lo que pasa que son muy ambiciosas, necesitan mayor descanso, una telenovela así debería estar dos veces por semana, ese judío de Suar las explota.
Funes quedó asombrada, no había nadie en aquel lugar, pero de repente sintió aquel comentario, hechos por la voz de una mujer. La sorpresa fue mayúscula, cuando ante ella, vio a una mujer, igual a la Princesa Leia.
- ¡La Princesa Leia! – exclamó Funes - ¡Qué cansada estoy que ya veo alucionaciones! ¡Mejor me voy a dormir! ¡Veo gente muerta! ¡Y personajes del cine!
Funes, extenuada por el cansancio, no pudo siquiera ir al baño, se quedó dormida, ahí en el camerino, mientras los estudios de grabación se cerraban. El sereno, un siniestro personaje salido de una película de terror de los años 50, cerró todo y Funes quedó ahí, metida en el camerino. Durmió un buen rato, y empezó a tener un sueño muy extraño, muy extraño…
De repente, en el sueño, ante ella se presentó un hombre alto y patón, con aspecto de basquetbolista y ninja al mismo tiempo, guantes negros, y varias armas ninjas consigo…
- Señora Funes, ha sido elegida para una nueva versión de “Exterminaitors” aquella saga de fines de los 80 y principios de los 90, tan exitosa, usted será una mafiosa a cuyo servicio estarán una banda de ninjas asesinos y asesinas, que asesinarán a todas sus enemigos y enemigas. Los asesinos asesinarán a sus enemigas y las asesinas asesinarán a sus enemigos.
- ¿Mis enemigas? Ja, ja, ja, tengo una lista muy extensa, quizás no Mercedes Funes, pero sí Alicia Ferreyra, y les aseguró que nadie quedará en pie, ja, ja. Todos y todas morirán.
- Yo, Carlos Leonel Schattmann, soy el jefe de esos ninjas asesinos – se presentó entonces el ninja – dadme el nombre de una mujer, de una enemiga vuestra, y será asesinada esta misma noche, la asesinaré con un arma ninja, le tiraré un Queso – Schattmann blandió una ninjato, una espada ninja, a la vez que tenía otras armas propias de los ninjas.
- Ya habrá tiempo – reflexionó Funes – quiero verlos morir uno por uno y una por una, je, je, por ahora, prefiero coger… Que raro y gracioso eso del Queso, ja, ja.
- Perfecto – dijo Schattmann – cogeremos entonces.
A continuación, dos enormes pies estaban sobre el rostro de Funes, con un olor intenso y asqueroso, era Queso puro, Funes empezó a olerlos, besarlos, chuparlos, lamerlos, eran los pies de Schattmann, despues tuvo sexo, y que sexo, un disfrute increíble, algo nunca visto, y eso que Funes cogió con muchos tipos, Nicolás Vazquez, uno de los más famosos, Benjamín Vicuña otro, y su nuevo marido, Cecilio Flematti…
Funes despertó, vio que era de noche, y que estaba en el camerino…
Funes despertó, vio que era de noche, y que estaba en el camerino…
- Que sueño raro tuve – dijo Funes – pero que bueno, como lo disfruté – hablaba sola – coger con ese ninja fue algo sublime.
- Y mejor aún será ser asesinada por ese ninja. Basquetbolista ninja, no fue un sueño, fue una realidad. Me ofrecí para asesinar a vuestras enemigas, pero la tradición dice que si un ninja ofrece sus servicios a una mujer para asesinar a otras mujeres y esta lo rechaza, debe ser asesinada, jamás se desaira a un ninja, y menos si era ninja es también basquetbolista, un Carlos y un Quesón.
Funes quedó con la boca abierta del espanto y vio como una espada ninjato se posaba sobre su cuello, ante su terror y desesperación, pero contra lo que ella misma creía, la espada quedó ahí, como sujeta por una cuerda, o algo, en cambio, de repente, ante ella tenía una lluvia de estrellas ninja, de shuriken cayendo sobre ella, mientras un shikomizue, una especie de cuchillo gancho, le desgarraba el culo, repleta de estrellas ninja en todo el cuerpo, y con el shikomizue dándole feroces heridas, Carlos Schattmann el asesino, ahora sí, la termino de asesinar clavándole la ninjato, la espada ninja, en el cuello, Funes cayó muerta.
- Queso – dijo Carlos Schattmann tras arrojarle un Queso a su víctima, y se fue de la escena del crimen con total impunidad.
Dicen que una extraña carcajada sonó en aquellos estudios aquella noche, y cuando al día siguiente, se descubrió el cadáver, y no solo eso, sino el de otras actrices de “Argentina, Tierra de Amor y Venganza” en medio de la conmoción y el estupor general, a muchos les llamó la atención una empleada de limpieza, que nadie vio antes, idéntica a la Princesa Leia.
una quesona podría asesinar al hermano, a Benjamín Vicuña
ResponderBorrarla verdad que algún Carlos debería hacer justicia y matar a esta mina
ResponderBorrarSchattmann siempre se hace el boludo y termina matando con una crueldad barbara, pero siempre pone carita de bueno
ResponderBorrarEste quesón es uno de los más creativo de los asesinos.
ResponderBorrarFunes estaba condenada, de haber aceptado la habría terminado asesinado, como Sandes eliminó a Analia Maiorana y Nancy Pazos.
No está mal el personaje de Leia, pero de ahí a robarle el protagonismo a la estimada Lady Dumitrescu, es demasiado. Y copiar los métodos. Lo que me hace sospechar que ambas fueron espías.
Y ya es hora de que Sandes se encargue de proteger a Lady Dumitrescu. Falta que yo termine cuidando a la rumana, en el hotel que se menciona en El asesino de Daniela Cardone.
¿Las remplazaran con clones? ¿O será que loa asesinatos son el motivo de que tal vez no haya segunda temporada?
ResponderBorrarYo creo probable la clonación, ya que están Andrea Frigerio y la china Suarez, tal vez prestadas por el prostíbulo de la Marquesa.
un rumor indica que el 13 ya tenía los clones preparados porque era inevitable que esto terminara con un Queso
BorrarMercedes Funes cantó en el capítulo 17: Soy de la raza calé que al mundo dicta sus leyes.
ResponderBorrar¿Lo habrá escuchado la Marquesa de Avila? ¿O será que Leia se adelantó?