La asesina de Fabricio Oberto
Era la época en que Ravelia, la Quesona
Asesina, usaba una cuenta de Instagram denominada simplemente @quesona_asesina.
Ocurrió en aquellos días que el basquetbolista Fabricio Oberto realizó un vivo
por Instagram.
Muchos eran los que saludaban a @obricio7
pero al basquetbolista le llamó la atención las preguntas que hacía la
@quesona_asesina, que era insistente, “¿Cuánto calzas?”, “Mostras los pies,
Fabri”, una y otra vez.
El basquetbolista se rió y finalmente
contestó “Calzo cuarenta y nueve” dijo primero, “Si muestro los pies se van a
asustar” dijo despues, en medio de risas y carcajadas. La Quesona se dio por
satisfecha con esas respuestas de Fabricio. Así comenzó la historia.
Algún tiempo después, poco tiempo despues, quiso el destino que Ravelia la Quesona y Fabricio Oberto coincidieran en un hotel, un hotel caro y lujoso sobre el Lago Nahuel Huapi, en San Carlos de Bariloche.
- Hola Fabricio, soy la Quesona - le dijo Ravelia al acercarse al basquetbolista.
- Sos igual a Valeria Mazza - dijo asombrado el basquetbolista - pero ella fue asesinada por Carlos Delfino.
- Yo soy la Quesona, en Instagram te pregunte cuanto calzas y que mostraras tus pies.
- Hoy conocerás mis pies, Quesona. Te espero en mi habitación.
Luego de que el basquetbolista ingresó a su habitación, la Quesona salió de la suya y se dirigió hacia el comedor, con los guantes negros que llevaba en la mano, agarró el largo y filoso cuchillo en forma de katana, comenzó a dirigirse hacia la habitación del basquetbolista, cuchillo en mano…
A pesar de que la mujer realizó pasos sigilosos, Fabricio se dio cuenta que alguien venía hacia él, y abrió la puerta de la habitación…
- Buenas noches Quesona – dijo Fabricio.
- Buenas noches Fabricio. ¿O debo llamarte Carlos Quesoberto?
- Ja, ja, Carlos Quesoberto! Muy buena esa! Sabría que vendrías…
- Te traje un Queso de regalo - dijo la Quesona - porque soy la Quesona.
- Deja el Queso sobre esa mesa - le dijo Fabricio, y la Quesona obedeció.
El basquetbolista estaba tirado en el piso con las piernas hacia adelante sobresaliendo sus enormes pies y sus zapatillas viejas, sucias y gastadas. Al lado de él, sobre una mesa, la Quesoan dejó la enorme horma de Queso Gruyere que sobresalía por sus agujeros voluminosos. La Quesona escondió el puñal en su espalda.
Fabricio le empezó a sacarle la ropa, con gran detenimiento, le mostró los pies, La Quesona le sacó las zapatillas, las medias y lo dejó descalzo, empezó a chuparlos, lamerlos, besarlos, una y otra vez, al propio Fabricio le encantó eso, y le llamo la atención lo posesionada que estaba la Quesona al hacerlo. Despues de eso, cogieron, con el sentado sobre el sillón, la cogida estuvo buena, gran disfrute para ambos, una cogida intensa, salvaje y furiosa, mientras lo hacían la Quesona le tiraba champagne a Fabricio.
- Que buena amante sos Quesona - dijo Fabricio.
- Tus pies son maravillosos, Fabricio - declaró la Quesona.
La Quesona se volvió a vestir y comenzó a moverse muy despacio y quedó a la espalda de Oberto, ahora ya no en el piso, sino sentado cómodamente en un sillón, dijo:
- Vamos a tener que hablar de varios temas, mi estimada…
- Por supuesto, y reitero lo que te dije hoy, tu nombre debería ser Carlos Quesoberto, no Fabricio Carlos Oberto.
- Vos asesinastes a Emanuel Ginóbili. No tengo dudas. Vos sos la asesina.
- Claro que fui yo, Fabricio, y ahora llegó tu turno, Caaaarloooossss Queeeessssoooobeeeeerrrrtooooo…
Ravelia no terminó de decir eso cuando en un rápido movimiento, levantó el cuchillo y ñle cortó la garganta de oreja a oreja al basquetbolista. Sorprendido desde atrás, Fabricio no pudo defenderse y la asesina culminó su tarea con cortes más profundos en el sangrante cuello.
Cuando terminó, la asesina dijo en voz alta el nombre de su víctima:
- Fabricio Oberto. #Queso.
El Queso Emmental, que permanecía servido en una bandeja sobre la mesa, fue el mudo testigo del asesinato. La asesina lo agarró y tiró el Queso sobre el cadaver del basquetbolista asesinado.
La asesina tomó entonces las zapatillas sucias, viejas y gastadas del basquetbolista, más los olorosos calcetines que llevaba puesto...
Dicen que la asesina acercó los calcetines a su nariz y quedó horrorizada ante el olor a Queso que tenían...- ¡Vaya! Estará muerto pero olía como un Gruyere...
Entonces se llevó las zapatillas y los calcetines como trofeo a la habitación…
A primeras horas de la mañana, la Quesona, con total impunidad, abandono el hotel, una hora después que lo hizo, las empleadas del hotel con gran espanto descubrieron el cadaver de Fabricio Oberto, degollado y quesoneado, la asesina ya estaba lejos, muy lejos, y mientras se acordaba del asesinato, río de satisfacción, y dijo en voz alta:
- Fabricio Oberto, #Queso.
EL COMIC COMPLETO de
"LA ASESINA DE FABRICIO OBERTO"
El bizarro relato de como Fabricio Oberto es degollado y queseado por Valeria Mazza
=== BONUS TRACK ====
otras imágenes del Asesinato de Fabricio Oberto
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En esta se aprecian las gigantescas zapatillas talle 49 de Fabricio |
Tiemblan scorsese como director, de niro, pacino...
ResponderBorrarflashee que era el boludo de ivrea/lazer
ResponderBorrarQué carajo es esto???
ResponderBorrarsería bueno ver que opinaría el gran Fabricio Oberto sobre este cuento donde es víctima de un asesinato y además quien lo asesina es Valeria Mazza
ResponderBorrarOtro que le fue igual o peor que a Luis... Buen asesinato
ResponderBorrarque me quesonee a mi valeria mazza
ResponderBorrarMe agarró sida después de leer el primer parrafo
ResponderBorrarno entiendo la asociación del Queso con Fabricio Oberto, igual me gusta el cuento, esta bueno esto de la Quesona Asesina... igual pobre Fabricio Oberto, no merece esto
ResponderBorrarLes pasa eso por confiamos,ven una chica linda y se dejan vislumbrar, por eso perecen
ResponderBorrarExcelente
Que letal es que Ravelia, su parecido con Valeria Mazza le debe de ayudar. ¿Quien podría creer que Valeria Mazza es una asesina? Tal una de las que estaba presente podría haber sido. Curiosamente, ella también serían quesoneadas.
ResponderBorrarexcelente... me recalienta este cuento... imaginó a Valeria Mazza degollado a Fabricio Oberto... y a Fabricio con la sangre chorreando... remanija... la asesina tirandole el Queso
ResponderBorrarque carajo es esto capo? anda al psicologo.
ResponderBorrarUn buen relato para releer.
ResponderBorrarme da miedo leer este relato, pobre Fabricio, que le corten así el cuello y que le tiren así un Queso
ResponderBorraruna gran asesina
ResponderBorrardebió de tener consideración del pobre Oberto
es todp tan bizarro y tan absurdo que por eso es buenisimo
ResponderBorrarPronto: El Asesino de Denise Rosenthal.
ResponderBorrar¿No hay una película en serio donde Oberto es jardinero y lo mata una mina?
ResponderBorrarFabricio quería ser asesino pero no lo dejaron porque no se llama Carlos, entonces inventó que su segundo nombre era Carlos, e intento matar a una mujer, que era Valeria Mazza, pero esta lo asesinó y le tiró un queso, le corto la garganta
ResponderBorrarhacete una fotos de Fabricio con Valeria Mazza en la cama, como las que estan de Manu Ginobili
ResponderBorrarno esta mal, es medio queso Fabricio Oberto
ResponderBorrardurante mucho tiempo figuro en wikipedia que el segundo nombre de Oberto era Carlos
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