El Asesino de Macarena García


La actriz española Macarena García, ganadora del Goya, se encontraba en la ciudad de Barcelona. Pero la capital catalana suele ser escenario de grandes conflictos cuando hay agitación independentista, y eso fue lo que ocurrió aquella noche, una gran batahola que se extendió por todas las Ramblas, con quema de toda clase de cosas.
- ¡Estos catalanes! – dijo Macarena mientras se refugiaba detrás de esos quioscos tan clásicos y habituales de las Ramblas barcelonesas - ¡Siempre lo mismo! ¡Cuanta razón que tenía el generalísimo!
- No pasa nada – le contestó una voz a Macarena – una tormenta que tiene que pasar, nada más, la República Catalana, ja, ja.
Macarena observó al hombre que había dicho esas palabras y se encontró con un joven muy guapo, patón, alto, pinta de modelo, sin dudas.


- Hola guapo – le dijo la actriz - ¿Quién eres?
- Soy Carlos Alberto García Cabrera, modelo, canarino, no catalán, ja, ja. 
- Que guapo eres, eres el hombre más guapo que hay en España.
- Tu eres Macarena García, ganadora del Goya, Baila tu cuerpo alegría Macarena, que tu cuerpo es pa’ darle alegría y cosa buena. Somos García, los dos, García.
- Ja, ja – le dijo Macarena que estaba como poseída – dejadme ser tuya.
- ¿Quieres ser mía?
- Aca en Barcelona, mientras siga siendo una ciudad española, estos tíos en cualquier momento declaran la independencia.
- Ya lo han hecho varias veces, después no ocurre nada. Pero bueno, sí, vamos al piso que estoy alquilando, en pocas cuadras llegaremos, es por allí, pasando el Triangle.


Rato después ya estaban en aquel piso (como dicen los españoles a los departamentos), con Macarena tirada en un sofá y Carlos arriba de ella, primero ella le olió los pies, el olor a Queso eran muy fuerte, fuerte de una manera repugnante y asquerosa, pero a Macarena le gustaba, estaba entregada, por eso disfrutó mucho, con goce y placer, cuando Carlos la penetró y la cogió, partiéndola como un Queso, con violencia, pero a Macarena le fascinó aquello. Estaba plena de feliz y goce.
- Tengo ganas de gritar “Visca el Barsa y Visca Catalunya” – dijo la actriz.
- Pues hazlo, hazlo, que otra vez te parto como un Queso.
- Visca el Barsa y Visca Catalunya!


Y una vez que dijo esto, Carlos, desnudo, con un calzón y guantes negros en sus manos, se tiró encima de ella, con un cuchillo, y empezó a apuñalarla en forma salvaje, una profunda puñalada en el pecho, otra en el corazón, otra en el estomago, un corte en el cuello, tajos en los brazos, en las piernas, una y otra vez, sin parar, sin piedad alguna.
- Queso – dijo el asesino, una vez finalizada su tarea, y mientras tiraba un Queso sobre la actriz, ganadora del Goya.
El asesino se fue del piso en forma momentánea, cuando regresó el cadáver de Macarena García, Queso incluido, ya no estaba, la Señora Puyol, tía de Carles Puyol, amiga íntima de la Marquesa de Avila, se había encargado del asunto, y dicen que todo concluyó con una extraña ceremonia en el Montjuic.
- Visca el Barsa y Visca Catalunya! Catalunya lliure!

Comentarios

  1. El problema con estos quesones que terminan con estas mujeres, que además de atractivas, parecen dispuestas a entregarse, sin histerias. Y esta, a diferencia de otras, no terminó hecha una piltrafa, sino con mucho entusiasmo.
    ¿Una incorporación para el prostíbulo de famosas vampirizadas?

    ResponderBorrar
  2. si bien a Carlos Quesón le gustan los Quesos tipo Gruyere o Emmenthal, es de hacer notar que hubo una marca de Queso Blanco que se llamaba García, como el apellido de este asesino

    ResponderBorrar
  3. el independentismo catalán, siempre presente en los Relatos Quesones "Relats Quesons"

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Relatos Quesones de la Semana

El Asesino de Juliana Awada

Carla Romanini, Queso de Oro 2023

La Asesina de Matías Almeyda, Matías Cóccaro y Matías Recalt

Los Asesinatos de Carlos Bossio, el Quesón

La Asesina de Matías Solanas Versión 2.0

Los Asesinos de Fátima Florez

Carlos Ignacio Fernández Lobbe, el rugbier asesino, el Quesón

Los Asesinos de Lilia Lemoine

El asesino de Valeria Mazza

La asesina de Fabricio Oberto