Carlos Manuel Buendía ¿Quesón o Quesoneado?
Erase una vez un basquetbolista llamado Carlos Manuel Buendía, si Buendía, asi, todo junto, como sí en inglés se llamará Good Morning o en francés Bon Jour, no es muy alto, mide 1,78 metros, pero al parecer tiene pies muy grandes, dignos de cualquier Carlos que se dedica al Queso, como lo demuestra esta foto.
Este basquetbolista juega en Boca Juniors, institución íntimamente ligada al Mundo Quesó, tres de los más grandes Quesones (Carlos Matías Sandes, Carlos Leonel Schattmann, Carlos Roberto Izquierdoz) juegan o jugaron allí, ya sea en el básquet o en el fútbol, y por supuesto, el popular Carlos “Carlitos” Tevez, el Quesón Quesoneado.
Según me han contado, en un reciente pasado, este muchacho Buendía, se encontraba en su habitación, esperando un partido de básquet en la noche, ya sea por el Super 4 o por la Liga Nacional, y ahí le tocaron la puerta. Buendía se levantó y fue a abrirla, pero nadie había del otro lado, lo que sí había era un gran paquete, que nuestro protagonista abrió. No había dudas de que se trataba dado el fuerte olor que emanaba aquel paquete.
- ¡Un Queso! – exclamó entonces Carlos Manuel Buendía - ¿Seré Quesón? ¿Qué significa este Queso? ¿Será mi destino tirar Quesos como Schattmann, Sandes o Izquierdoz, o en cambio, me tirarán un Queso a mí, como le pasó a Tevez?
Buendía se estaba haciendo aquella pregunta tan clave y vital para la existencia humana, cuando otra vez sonó la puerta, el basquetbolista fue a abrirla, y ahora ante el, había una bella rubia, una mujer realmente irresistible.
-
Hola, ¿Tu eres Carlos Manuel Buendía, verdad? –
dijo la rubia, con acento español
-
Así lo dice mi Documento Nacional de Identidad.
-
Yo soy Carla Rosón, quizás me conozcas, soy de
la serie española Elite.
-
No te conozco, no veo series, mi mundo es la
cumbia y el cuartetazo.
-
Así esta el país, por la cumbia y el cuartetazo,
sesenta por ciento de pobres.
-
No te metas con mi país, si vos sos gallega.
-
Tienes razón chaval, ¿Y que te parezco?
-
Muy bella.
- Vengo a tener sexo contigo, estimado Carlos Manuel Buendía, yo soy el regalito verdadero, no ese Queso, ja, ja.
Carlos Manuel Buendía quedó estupefacto, abrió la boca, y ya no pronunció palabra, la rubia comenzó a desnudarse ante el, ofreciéndole un streap trease al ritmo de un popurrí de cumbias y cuartetazos, lo invitó a acostarse, y el muy obediente y sumiso, acotó la orden, allí Carla lo desnudó todo, y empezó a chuparle los pies, olerselos, lamerlos, se hizo un festín con los pies de Buendía, que hizo lo propio con los pies de Carla, la diferencia era que los de el olían a Queso, y los de ella a perfume francés, o mejor dicho a imitación de perfume francés comprada en La Salada, pero la verdad que olían bien.
Tras aquel juego de los pies, se revolcaron en la cama, ella le chupó la pija por un buen rato, el le chupó las tetas, la revolcada fue salvaje y feroz, y así la penetró con furia, como sí estuviera tirando unos triples, al fin terminó todo, Carla parecía insaciable, con ganas de seguir, pero Carlos Manuel Buendía ya no daba más, había quedado hecho una piltrafa, estaba feliz y eufórico, pero muy cansado, la rubia lo dejó con la batería descargada.
-
No doy más – dijo Carlos Manuel Buendía.
-
Pero yo quiero más, Carlos Manuel Buendía, soy
insaciable, ja, ja.
Y en ese momento, Carla Rosón le tiró el Queso a Carlos Manuel Buendía, el Queso cayó sobre la cabeza del basquetbolista, que se sintió aturdido por el Quesazo, y cerró los ojos, al abrirlos, vio que un cuchillo estaba en un costado de la cama.
- ¿Qué vas a hacer, Carlos Manuel Buendía? ¿Vas a ser un Quesón digno como Carlos Leonel Schattmann y me vas a asesinar con ese cuchillo, y me vas a tirar un Queso? ¿O en cambio querés ser un Carlos indigno como Carlos Diego Scott, y esperar resignado que te asesine y te tiré un Queso?
El destino de Carlos Manuel Buendía tenía una bifurcación
con dos opciones opuestas: la de ser un asesino de mujeres o la de ser
asesinado por una mujer ¿Quesón o Quesoneado?
Opción 1, ser Quesón
El basquetbolista no dudó, agarró rápidamente el cuchillo, y
se tiró encima de Carla Rosón, asestándola a la rubia una feroz puñalada en el
pecho, de una manera tan rápida, que ni bien la rubia terminaba de decir
aquellas palabras recibió la herida fatal, luego hubo otras puñaladas, las
suficientes para asesinar a Carla Rosón, la apuñaló en forma feroz y salvaje,
con tanta furia que le estaba dando la última puñalada con la mano derecha,
mientras le tiraba el Queso con la mano izquierda, simultáneamente (como diría
Jorge Corona).
- Queso – dijo con furia Carlos Manuel Buendía, mientras tiraba el Queso sobre el cadáver de su víctima.
Opción 2, ser Quesoneado
El basquetbolista dudó, tembló de miedo y quedó paralizado
ante la disyuntiva de ser asesino o de ser asesinado, tanto dudo y tanto
tembló, que Carla agarró el cuchillo y se tiró sobre Carlos Manuel Buendía, cortándole
la garganta con una herida profunda, de derecha a izquierda, y otra herida aún
más profunda, de izquierda a derecha.
-
Queso, Carlos Manuel Buendía, Ja, ja, ja – río la
asesina, mientras contemplaba el cadáver de Carlos Manuel Buendía, al que
acababa de asesinar, y le tiraba el Queso encima – un Carlos indigno de su
nombre, al que le tiraron un Queso, cuando pudo ser el que tiraba los Quesos.
Y con total frialdad e impunidad, la asesina se alejó de la
escena de la crimen.
-
¡Queso! ¡Queso! ¡Queso! – comenzó a gritar Carlos
Manuel Buendía.
-
¿Qué pasa? ¡Me despertaste con esos gritos! – le
dijo su compañero de equipo, Federico Aguerre - ¿Vos también estas obsesionado
con los Quesos como Schattmann?
-
No, tuve una pesadilla, primero era una película
porno, me cogía a una rubia espectacular, era algo sublime, despues era una
película de terror, la tipa era una asesina, y yo la tenía que asesinar o ella
me asesinaba a mí.
-
Dejate de joder, aunque recuerdo que la gente
del fobal decía que Carlitos Tevez tenía sueños similares, despues lo
quesonearon, ja, ja, date vuelta en la cama, y seguí durmiendo.
Aguerre siguió durmiendo como si nada, pero Carlos Manuel Buendía ya no pudo dormir, aquella tarde había recibido un Queso de regalo, ¿Quesón o Quesoneado? No es lo mismo tirar un Queso a que te tiren un Queso.
JA, JA, JA, VOLVISTE CARLITOS,
ResponderBorrarTIENE QUE SER QUESONEADO, UN QUESÓN NO PUEDE LLAMARSE BUENDÍA, EN TODO CASO SERÁ BUEN QUESO,
¿COMO LE VA MR GOOD CHEESE?
se llama Carlos Manuel, como Eisler, pero este sería un mal quesón, que le tiren un queso, que diferencia con el zorro del queso
ResponderBorrares un buen relato, original, donde un Carlos se plantea ser asesino o que lo maten, no esta nada mal, muy bueno, creo que puede tener su chance como Quesón, como quesón menor, colaborador de algun crimen, o bien en alguna aparición, tambien puede tener varios cuentos donde lo asesinen, jugar un poco con los dos papeles, puede ser innovador, al fin y al cabo, Carlitos Tevez cumple un rol parecido, y antes también Charly Berlocq, despues quedo como asesino más o menos fijo
ResponderBorrarcelebro este regreso, espero estes bien, un saludo!!!
no tiene la gracia de otros asesinos pero igual que no lo discriminen, sino te denuncio al INADI, jua, jua
ResponderBorrareste carlos puede matar a tipas feas del arrabal
ResponderBorrarCarlos Olivieri, un actor de los 70 y 80, despues director de teatro, muy amigo del supremo Carlos Calvo, puede aparecer en algunos relatos quesones retro, siempre muy apetitosos
ResponderBorrarque sea quesón, pero que no mate a una Carla, para quesonear chabones estan todos los demas chabones que no se llaman Carlos (como yo), que se mantenga el pacto entre carlos y carlas, le pueden dar un papel menor eso sí, si juega al basquet en boca podría ser un lacayo de Sandes o de Schattmann, o de los dos, bajo las ordenes de Dumitrescu
ResponderBorrarMe sumo a ese pedido. No hay quesonear a una Carla, sino incorporarla a las quesonas. Que se mantega el pacto entre Carlos y Carlas.
BorrarCHE CARLOS, ¿SE JUBILO CARLOS MELIA?
ResponderBorrarPODRÍAN DARLE EL RETIRO AL GAY ESE
Que vuelva un relato de Dumitrescu y otro de la Tatuada, uhhh, pobre Dumitrescu, Rumania afuera del Mundial, no llego ni al repechaje, no clasifica desde Francia 98, un desastre, debe estar destrozada
ResponderBorrarun Carlos Arfe en Barracas Central, hacele un cuestionario de asesino, puede ser un sicario
ResponderBorrarquise poner Carlos Arce no Arfe
ResponderBorrary en lugar de cuestionario, quise poner cuentito
nominó a Buendía como esclavo, lacayo o sirviente de Maru Sandes en un futuro cuento
ResponderBorrarVolvieron los relatos. Para aplaudir, que buena noticia.
ResponderBorrarBuendía me recuerda a Cien años de soledad, donde no había ninguna Carla. Aunque sí, algún asesinato.
Es una interesante variante lo del título.
Con dos finales para elegir. Obviamente, voy por la opción dos.
Esa actriz podría ser incorporada como quesona.
Tampoco está mal que haya sido un sueño.. Como una advertencia de no decir No doy más, ante una Carla. Porque pueden ser las últimas palabras o casi.
Y coincido en que ninguna Carla sea quesoneada, como ninguna Leona. Es mejor que se vayan incorporando como quesonas.
Podría ser algún relatos quesones de las Ravelia Zamas, madre e hija.
¿Quién consolará a la Lady por la derrota deportiva de Rumania? ¿Sandes o Paul Toombes?
Saludos.
jajaja, realmente me hiciste reír, he leído algunas de tus historias de asesinos quesones y te confieso que el queso es uno de mis alimentos favoritas pero tengo miedo a que se aparezca algún asesino, zafo porque no soy estrella ni famosa modelo.
ResponderBorrarsupongo que en breve se publicará algún cuento con Carlos ganador de Bake Off como asesino, un Quesón que promete mucho
ResponderBorrarPodría ser El asesino de Pamela Villar.
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