El Asesino de Bibiama Neccosa

Una vez más la selección argentina de rugby, “Los Pumas”, perdieron un partido. Un nuevo papelón, esta vez ante los All Blacks, la semana anterior contra los Springboks. El verso de la derrota digna ya no convence a nadie.

Cuando la derrota ya era un hecho irreversible, Carlos Ignacio Fernández Lobbe, ex jugador de Los Pumas, ahora entrenador, que estaba viendo el partido en un bar tipo irlandés, agarró una botella de whisky, la levantó y la golpeó con furia sobre la mesa, rompiéndola en mil pedazos.

La gente que también estaba viendo el partido quedó estupefacta al ver la reacción violenta del rugbier.

“Quedate tranquilo pibe, es solo un deporte”.

El rugbier se dio vuelta. Quien había dicho esto era una mujer, una conocida actriz, Bibiama Neccosa, que estaba de casualidad en ese lugar. El rugbier la reconoció y no pudo evitar decir

“¡Bibiama Neccosa! ¡Bibiama! ¡Casi como Viviana Canosa!” dijo el rugbier recordando a una de sus víctimas más famosas.

“¡Pobrecita Viviana Canosa! ¡La asesinaron hace tantos años!” dijo la Necossa.

Fernández Lobbe se tranquilizó. Neccosa fue a la barra y pidió dos pintas de cerveza. Regresó y le dio una al rugbier, diciéndole

“¿Sabes una cosa? Me calentó mucho verte así, siempre quise tener sexo con un rugbier, con un rugbier salvaje como vos. Un rugbier y un cheto como vos. Carlos Ignacio Fernández Lobbe así te llamas. ¿No es cheto llamarse Carlos Ignacio Fernández Lobbe?”

Carlos Ignacio Fernández Lobbe no lo podía creer. La mina había venido ante el, así sola, era algo que su condición de Quesón debía aprovechar.

Si queres, podemos disfrutar – le dijo Carlos Ignacio Fernández LobbeNo quiere perder tiempo.

Apenas unos minutos después, en el cuarto de un albergue transitorio, Bibiama Neccosa estaba chupando, lamiendo, oliendo y besando los pies de Carlos Ignacio Fernández Lobbe, repletos de un olor a Queso apestante, intenso y sofocante. Queso total. Queso de Quesón.

Tras el Queso, siguió una auténtica fiesta sexual, que dejó a Neccosa casi sin fuerzas, tanto que se quedó dormida.

Bibiama Neccosa abrió los ojos

“¡Aaayyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy!” gritó de susto, horrorizada ante lo que veía.

No era para menos. Ante ella vio a Carlos Ignacio Fernández Lobbe, al rugbier, con un cuchillo en la mano derecha y un gigantesco Queso en la mano izquierda. El rugbier tiró el Queso sobre el actriz y luego se tiró en forma salvaje sobre ella. La apuñaló de una manera desenfrenada, dándole más de cien puñaladas

“Queso” dijo Carlos Fernández Lobbe en voz alta mientras tiraba el Queso sobre el cadáver de Neccosa.

Y asi concluye esta breve historia que relata un nuevo asesinato del rugbier Carlos Ignacio Fernández Lobbe, el asesino de Soledad Solaro, el asesino de Viviana Canosa, el asesino de Andrea Frigerio, el asesino de Pamela David, el asesino de Dolores Barreiro, el asesino de Daniela Cardone, el asesino de Coki Ramírez, el asesino de María Vazquez, el asesino de Ursula Vargues, el asesino de Verónica Varano, el asesino de Mariana Arias, el asesino de Claudia Albertario, el asesino de Gisela Barreto, el asesino de Julieta Díaz, el asesino de Karen Reinchardt, el asesino de Daniela Urzi, el asesino de Carolina Peleritti, y ahora también el asesino de Bibiama Neccosa, Carlos Ignacio Fernández Lobbe, el rugbier asesino, el rugbier Quesón.

“¿No es cheto llamarse Carlos Ignacio Fernández Lobbe?"