El Asesino de Paulina Rubio
Del otro lado de la Cordillera, en Chile, en el Festival de Viña del Mar, se encontraron dos mega estrellas mexicanas, Paulina Rubio y Carlos Rivera. Los miles de chilenos que allí se congregaron quedaron extasiados ante la cantante, que hizo furor con su canción “Ese hombre es mío”. Su éxito fue resonante. Paulina Rubio parecía la estrella de Viña del Mar.
“Espero yo ser ese hombre” dijo Carlos Rivera mientras comenzaba su actuación, que lejos de causar furor en el público, prefirió parecer un monigote e interpretar “Hakuna Matata” de “El Rey León”. Al terminar, Carlos empezó a cantar “En la jungla, la densa jungla, dormido esta el león”. Los chilenos lo silbaron y abuchearon pero Carlos redobló la apuesta y cantó “El ciclo de la vida” pero lo hizo de una manera desastrosa y al terminar dijo:
- Chilenos conchetumadre, weon weon weon, una vez le ganaron 7 a 0 a México, mi México lindo y querido, váyanse todos a la mierda, hijos de la chingada, mamones y chachalacos.
El público empezó a provocar incidentes. Los carabineros retiraron a Carlos Rivera del escenario, y lo metieron en su camerino. Paulina Rubio le fue a decir a su compatriota:
- ¿Qué ocurre mi cuate? ¡Has visto el escandalo que has provocado! ¡Con lo que yo quiero a los chilenos! ¿Estas drogado pendejo hijo de la chingada!
- No se que me ha pasado – dijo Carlos Rivera – de repente, sentí ganas de decir esas cosas, me descontrolé, lo siento.
- Dicen que Chile y México pueden romper relaciones.
- No pasara nada.
- ¿Por qué?
- Porque soy un Quesón – dijo Carlos Rivera.
- ¿Un Quesón? – dijo Paulina Rubio - ¿Quesón? ¿Es que acaso eres como el Queso de Oaxaca?
- No, mi cuate, como el Queso de Oaxaca no, en todo caso sere como esos Quesos de Holanda o Suiza, ja, ja, ¿Cogemos?
- ¿Cogemos? ¡Te acusaré por acoso, Carlos! ¡Estas borracho!
- Si no he tomado nada de tequila, mi cuate. Pues vamos a comer unas Quesadillas, y cojamos, mi Morra. Somos de la tierra de Carlos Villagrán, gran Quesón, y que difundió el arte de los Quesones por toda América, recuerda que quesoneo a Florinda Meza en 1978. Despues el programa de Chespirito fue una verga, porque se fue Quico, Rondamón y doña Florinda era un clón.
- ¡Estas chiflao! – exclamó Paulina Rubio.
En ese momento, Carlos Rivera se sacó los zapatos, las medias, y los calzoncillos, quedo descalzo y en pelotas.
- Dale, mi niña, mi cuate, cojamos.
- Está bien Carlos, pero me reservo el derecho de acusarte.
- Haz lo que quieras.
Paulina Rubio se arrodilló y empezó a chupar los pies de Carlos, a besarlos, lamerlos y olerlos, después le chupó la pija, se acostaron y cogieron, Paulina le hizo cosquillas en todo el cuerpo al cantor mexicano, siguieron cogiendo, el cantor seguía gritando como el Rey León:
- Wee-ooh wim-o-weh. Wee-ooh wim-o-weh.
- Wim-o-weh o-wim-o-weh o-wim-o-weh o-wim-o-weh
- o-wim-o-weh o-wim-o-weh o-wim-weh.
- Wim-o-weh o-wim-o-weh o-wim-o-weh o-wim-o-weh
- o-wim-o-weh o-wim-o-weh o-wim-weh.
Paulina Rubio vio que los pies de Carlos, que son de un talle 42/43 en forma normal, habían crecido de una manera espectacular y ahora calzaba como un 46/57.
- Es increíble – dijo Rubio.
- Sigamos cogiendo, sigamos cogiendo.
Siguieron cogiendo un rato más, el goce fue total, cuando terminaron, el cantante le dijo:
- Cantemos juntos una canción, aca en Chile, que tal “Guadalajara”
- Pos bien manito, cantemos “Guadalajara”.
- Vamos al escenario
Volvieron al escenario, ante el grito de los chilenos. Juntos comenzaron a cantar…
Guadalajara, Guadalajara,
Guadalajara, Guadalajara...
Tienes el alma de provinciana
hueles a limpia rosa temprana,
a verde jara fresca del rio,
son mil palomas tu caserio,
Fue en ese momento cuando, sin que Paulina Rubio se diera cuenta, Carlos Rivera tomó el micrófono con fuerza en sus manos, se acercó a la cantante y ¡zas! golpeó a Rubio en la nuca. El golpe fue mortal, pero Carlos se aseguró que la cantora estuviera muerta, dándole un par de golpes más. Asesinada Paulina Rubio, Carlos Rivera tomó un Queso, un gran Queso que le regalaron sus fans chilenas, y dijo en voz alta:
- Queeeesooooooooooooooo.
Carlos Villagran, Quico, pero disfrazado como “el Cuajinais” el personaje que interpretaba en “El Chapulín Colorado”, entró al camerín y dijo:
- Callate, cállate, que me desesperas.
- Es que no me tienes paciencia – declaró Carlos Rivera.
- Bien hecho, Carlillos, ya eres un Quesón.
- Siempre lo fui, acaso quien te crees que era aquel asesino que azotó Jalisco, Nuevo León, León, Campeche, Durango y todo México… el que la prensa llamó “el chacal de los quesotecas” ja ja ja ja ja….
El público creyó que era todo un show y gritó enfervorizado, pero créanme gente fue todo cierto, y lo vieron millones, millones.
una historia muy loca, con muchas incoherencias, no se, no me termina de convencer
ResponderBorrarmás participación para Carlos Villagran, asesinando y tirando Quesos, un Quesón que merece más protagonismo
ResponderBorrarNo está nada mal. Tiene mucho sentido que haya sido con un microfono como objeto contundente. También podría haber sido por electricidad ya que algunos dan descargas.
ResponderBorrarY tiene sentido que haya sido en ese festival, con un público tan difícil que lo llaman El Monstruo. Ya hicieron llorar a Xuxa, potencial para quesonear, lo que tuvo su gracia. Así que en una próxima vez, podrían pedir que se quesonee a una famosa.
Paulina Rubio estaba para el crimen, en más de un sentido.
Carlos Villagran podría matar mujeres, llevandolas al borde de un balcón. Y empujarlas, al grito de "Chusma, chusma".
Buen comienzo para la serie de 32 famosas para ser quesoneadas.
Ahora espero que no haya problemas con la verificación de comentarios, con los Escaparates de tiendas, semáforos, autobus, etc.
y las bocas de incendio
BorrarCarlos Vives que asesine utilizando una descarga eléctrica mientras canta "la gota fría" y Carlos Baute que use algun dispositivo especial para asesinar je je
ResponderBorraruna flecha estilo Robin Hood o Flecha Verde... puede ser el arma que use Carlos Baute
BorrarCon Jennifer López, Carlos Vives podría imitar algún recurso letal de otro queson, como el estrangulamiento. Luego de disfrutar de sexo con la famosa. Por supuesto, habría sexo anal, mientras Jennifer se mueve ritmicamente sus caderas. Y habría latigazos, y hasta patadas con intensidad reforzada, por el físico de la famosa.
BorrarNo la habría incluido como víctima. Pero a otro comentarista le pareció bien.