El Asesino de Micaela Orsi

Quizás alguien recuerde a Carlos Marinelli, un futbolista de discreto nivel, de cierta fama en los años 2000, y que pasó por equipos como Boca, Racing, Middlesboroug, Torino, Braga, Millonarios y San Martín de Perú, era una gran promesa, que no pasó nada, ni siquiera pudo afianzarse en un fútbol de cabotaje. Pero no es el objetivo de este post hablar de la carrera deportiva de Carlos Marinelli, sino de su papel como Quesón, pues como otros Carlos, Carlos Marinelli asesinó a muchas mujeres y tiró muchos Quesos, aunque sus crímenes no sean muy conocidos, aca recordaremos uno de ellos. Con su rostro entre aniñado y vampiresco, lo que a Carlos Marinelli siempre le sobró es tener cara de asesino (1).

Tras su paso por Inglaterra, Carlos Marinelli tenía como recuerdo un sable del siglo XVIII, y realmente le gustaba enarbolando y usarlo, al estilo de los espadachines. Y le gustaba usar el sable para cortar el Queso y luego comerse el Queso. A Carlos le gustaba vestirse de negro, y con el sable y el Queso, salía a asesinar por las noches.

En una ocasión, Carlos Marinelli se encontraba de vacaciones en el Uruguay, cuando le comentaron que en una casa vecina vivía Micaela Orsi, una bella modelo uruguaya (2).

- ¡Oh! – pensó Carlos - ¡Que ocasión para asesinar y tirar un Queso!

Esa noche, entonces, Carlos, vestido de negro, con el sable inglés y la katana logró meterse en la casa de Micaela Orsi. La bella modelo se encontraba durmiendo, disfrutando de un buen sueño, un sueño muy profundo, la modelo se veía en una mansión de terror, esas llenas de fantasmas y espíritus, o de vampiros, sí de vampiros, porque Micaela comenzó a soñar que un vampiro le mordía el cuello.

- ¡Ahhhhhhhhhhhhh! – comenzó a gritar, y al despertarse vio que Carlos Marinelli le estaba mordiendo el cuello, era el estilo que este asesino tiene atacar a sus víctimas.

- ¿Quién eres? – gritó aterrorizada Micaela al observar a Carlos.

- Soy Carlos Marinelli, no soy M el Vampiro de Dusseldorf, pero sí C el Vampiro de los Carlos, o Q el Vampiro Quesón, ja, ja, ja, si la mordida no te gustó, te ofrezco mis pies.

Y Carlos entonces puso sus pies encima de Micaela, pies con fuerte olor a Queso, pies que a Micaela le resultaron repugnantes al principio, pero muy atractivos despues, al punto que empezó a olerlos, besarlos, lamerlos y chuparlos, y no pasó mucho tiempo, para que Carlos Marinelli estuviera encima de ella, cogiéndola de una manera muy fuerte, y con estilo vampiresco, pues mientras la penetraba la mordía el cuello. Micaela vivió todo aquello con gozo y placer.

- Gracias por esta vampiresca visita Carlos – le dijo Micaela.

- De nada, estimada Micaela, aca tengo ahora el sable, para disfrutar más.

- ¿El sable? – Carlos blandió el sable y se lo clavó en el cuello a Micaela, atravesándolo - ¡Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaajjjjjjjjjjjjjjjjjjjjj! – fue el grito de dolor de la modelo hasta su agonía final.

- Queso – dijo Carlos Marinelli mientras tiraba el Queso sobre el cadáver de Micaela Orsi.

Y así, brevemente, sin entrar en más datos cansadores y reiterativos, hemos contado uno de los crímenes más representativos de este gran asesino, injustamente olvidado, que es Carlos Marinelli.

(1) https://www.goal.com/es/noticias/que-paso-con-carlos-marinelli-el-nuevo-maradona-que/a0wlvpwalbax176bjirog6chw

(2) https://es.wikipedia.org/wiki/Micaela_Orsi