El Asesino de Nathy Peluso
Carlos Buemo, @charlybuemo, basquetbolista, se encontraba pasando un gran momento en Peñarol de Mar del Plata, y se convirtió en una de las estrellas de inicio de la temporada de la Liga Nacional. Gran presente para el joven Quesón, que ya había asesinado a varias minas, entre ellas Nicky Nicole y María Becerra.
Uno de sus compañeros de equipo, pasó una música, y Charly preguntó quien era la cantante:
- Es Nathy Peluso, una cantante una y compositora argentina - española que fusiona los géneros hip hop, soul, trap, jazz, rap, salsa y swing dentro de su música.
- Queso – pensó Carlos Buemo – debo completar la trilogía, no hay dos sin tres, ya les tiré un Queso a Nicky Nicole y María Becerra, ahora le llegó el turno a Nathy Peluso.
El basquetbolista agarró entonces varios Quesos, y dos espadas, dirigiéndose al lugar donde estaba Nathy Peluso, algún hotel, esos tan habituales en estos relatos, pero para sorpresa de Carlos, el lugar estaba rodeado por cuatro chicas, de unos veinte años, denominadas “las Peluso Girl”.
- Un obstáculo impensado – pensó Carlos Buemo – bueno, por ahora las reduciré con mi Queso.
Carlos quedó descalzo, y de sus pies salió un olor a Queso tan apestoso, que las Peluso Girl, una a una, se fueron desmayando, quedando rendidas a sus pies. A continuación, entró entonces a la habitación. Peluso al principio, también se desmayó al oler aquella intensa fragancia, Carlos Buemo entonces puso sus pies encima de la cantante.
- Que débil resultó esta Nathy Peluso, y eso que es alta, parece que mide 1,70, no es la miniatura de Nicky Nicole – pensó Carlos Buemo – igual no aguanto nada el olor a Queso.
Le pasó los pies encima del rostro varias veces, y Peluso empezó como a reaccionar, media inconsciente, empezó a chupar, oler, besar y lamer esos enormes pies del basquetbolista, pies realmente muy grandes, olorosos como pocos, al volver en sí, Peluso tomó de las piernas a Buemo y le dijo:
- ¿Quién sos? ¡Quiero ser tuya!
- Soy Carlos Buemo, Charly para los Friends, y sí, te haré mía, espero te guste, quiero darte satisfacción y placer.
Y eso fue lo que ocurrió, hubo satisfacción y placer, porque la cogió muy bien, con suavidad por momentos, con ferocidad por otros, por adelante, por atrás, con los pies, todo muy divertido, sexual y fogoso.
- Haré una canción con esta cogida – dijo Nathy Peluso – la mejor cogida del mundo.
- Pues la harás post mortem, querida Nathy Peluso, porque ahora te asesinaré.
- ¡Nooooooooooooooooooooooo! – gritó Nathy Peluso .
Carlos Buemo entonces tomó las dos espadas y de un certero golpe, casi que la partió en dos a Nathy Peluso, la asesinó de ocho brutales heridas, tajos que la desangraron a la cantora, cuatro heridas feroces en el torax, dos en el cuello y las otras dos en la espalda, cuatro heridas con cada a de las espadas, cayendo así asesinada.
- Queso – dijo Carlos Buemo mientras tiraba el Queso sobre su víctima.
El asesino, cumplido su objetivo, salió de la habitación, con las espadas aún sangrientas, observó a las Peluso Girl, que volvían en sí tras quedar desmayadas por el olor a Queso, no duraron mucho, Carlos las asesinó a todas usando las dos espadas, primero asestándola brutales heridas en el cuello, y despues rematándolas de otras heridas en el pecho. Por suerte, tenía varios Quesos, o sea, que tiró los Quesos sobre las cuatro Peluso Girl.
- Queso, Queso, Queso, Queso – desconociendo los nombres de las Peluso Girl pero sumando cuatro victimas a su haber, identificándolas como “Peluso Girl I, II, III y IV”.
Para Carlos Buemo la trilogía estaba completa y del resto se ocuparon ahora las Santillanas, esas mujeres iguales a María Laura Santillan, que se comportan como robots, y que limpiaron la escena del crimen, llevándose los cinco cadáveres, el de Nathy Peluso y las Peluso Girl. Para la humanidad, Nathy Peluso se fue de viaje astral a recorrer las galaxias y los mundos paralelos de universos contiguos.
un asesino experto en asesinar a esta clase de minas, una buena decisión y se lo ve contento, pasando un gran momento en el basquet, aprendió mucho de Sandes y Delfino, maestros del basquet y del queso
ResponderBorrarfea esta mina, con el ojo distinto, pero Charly Buemo se especializa en matar a esta clase de cantoras, según parece, ¿tendrá nuevas victimas?
ResponderBorrarDoja Cat, Lola Índigo, en el Lollapallooza, podrían ser víctimas
Borrarun asesino sonriente, las minas que estaban con Peluso debieron defenderla, aunque no aguantaron el olor a Queso, buen relato, como todos estos
ResponderBorrarme gusta este asesino, debe tener más protagonismo, y esta podría hacer alianzas con Sandes o Schattmann
ResponderBorrarla verdad que la mina asusta con esa caripela
ResponderBorrarsi haces música que no le gusta al autor del blog, zas, te mandan un Carlos (o una Carla, si es un chabón, como paso con LGante)
ResponderBorrarJajaja. El talento tampoco garantiza mucho. Fue quesoneada Erica García, interpreta de buenas canciones, talentosa guitarrista.
ResponderBorrarMe gusta el morbo.
Un punto menos por no dedicarla tiempo a las fans. O llamar a otro Carlos, para encargarse de ellas.
Buen relato.