Los Asesinos de las Kardashian

Hace rato que los mellizos Carlos Gerardo (“Charly”) y Carlos Isaac (“Carlitos”) Lazcano Miranda están alejados del mundo top del rugby. En su momento, estos rugbiers tucumanos tuvieron una destacada actuación en el club Huirapuca y fueron campeones mundiales con los Pumitas a fines de los 90. En la actualidad, residen en la parsimonia provinciana que ofrece la ciudad de Concepción, en la Provincia de Tucumán.

Por eso, a ambos, les resultó curioso recibir un mensaje del rugbier francés Charles Ollivon, que con su 1,99 metros (dos más que los mellizos) y su calzado número 51 (uno más que los Lazcano Miranda), figura del RC Toulón.

En síntesis, Charles Ollivon invitó a los mellizos Lazcano Miranda a participar de un partido amistoso con glorias del rugby actuales y pasadas a jugarse en la ciudad de francesa Marsella (Marseille), a beneficio de otro gran rugbier, el neocelandés Carlos Spencer, que al parecer necesitaba unos mangos.

Los mellizos Lazcano Miranda no dudaron ni un instante y un par de días ya estaban volando rumbo a Europa, y tras cambiar de avión en Madrid (Barajas) llegaron a París, y luego de un día en la capital francesa para disfrutar de unos buenos Quesos y un rico champagne, los rugbiers tucumanos tomaron el TGV a Marseille.

El tren llegó a la estación principal de Marseille, llamada Saint Charles – sí, Saint Charles o San Carlos (1) – donde para sorpresa de los Mellizos, el propio Charles Ollivon, los estaba esperando.

- Bienvenue mes amis Carlos et les grands fromages! (Bienvenidos mis amigos Carlos y Quesones) – les recibió Charles Ollivon - Je ne les connaissais pas jusqu'à aujourd'hui, mais je les ai convoqués car il devait y avoir une présence argentine, et ils devaient s'appeler Carlos (no los conocía hasta hoy, pero los convoqué porque debía haber presencia argentina, y se tenían que llamar Carlos).

Los tres Carlos (porque un Charles es un Carlos), los dos tucumanos y el francés se saludaron, se rieron, y se entendieron como pudieron, Charles dominaba algunas palabrejas en español, aunque Charly y Carlitos no entendían nada en francés. Más alla de las diferencias idiomáticas ya sabemos que para un Carlos no hay nada mejor que otro Carlos, y para un Quesón, nada mejor que otro Quesón. Y entre Quesones surge una química especial, como ocurrió entre Charles Ollivon y los Mellizos Lazcano Miranda.

De camino en el auto de Charles Ollivon rumbo a la residencia que el rugbier tenía en las afueras de Marseille, el francés les contó la verdad de porque los había convocado.

- Une femme roumaine, qui vit à Monaco, m'a dit que le Kardashian devait être tué, et qu'en Argentine il y avait deux jumeaux meurtriers qui étaient ceux indiqués pour commettre ce meurtre, car il y en a trois, je suis le troisième tueur qui est nécessaire (Una mujer rumana, que reside en Monaco, me dijo que las Kardashian debían ser asesinadas, y que en Argentina había dos mellizos asesinos que eran los indicados para cometer este asesinato, como son tres, yo soy el tercer asesino que hace falta).

- ¡Lady Dumitrescu! – dijeron al unísono los mellizos Lazcano Miranda – un honor que nos hayan traído hasta Francia para quesonear a estas minas.

Los tres rugbiers llegaron a la Residencia de Charles Ollivon en las afueras de Marseille, y grande fue la sorpresa de los Lazcano Miranda al ver que las Santillanas, las cuatro clones de María Laura Santillán, eran las mucamas de Ollivon. Así, luego de que los tres rugbiers se comieron unos buenos Quesos franceses, lo mejor que Charles Ollivon pudo ofrecer a los Lazcano Miranda, llegaron las hermanas Kardashian, Khloe, Kim y Kourtney. Salvo Khloé que mide 1,74, las otras dos no llegan al metro sesenta y por eso quedaron como enanas al lado de los tres rugbiers, cada uno con casi dos metros de altura.

Las tres Kardashian ingresaron a la Residencia, para ellas era una invitación de la Fundación Dumitrescu, para participar de un festival para recaudar fondos para la Corona Británica.

- We must all help the British crown, the Queen needs us, a good cause to leave our money (todos debemos ayudar a la corona británica, la Reina nos necesita, una buena causa para dejar nuestro dinero) – señaló Kim Kardashian.

- I prefer to give it to the queen, who will know what to invest in, and not the poor, to spend it on wine and drugs (Prefiero darselo a la reina, que sabrá en que invertirlo, y no a los pobres, que se lo gastaran en vino y drogas) – dijo Khloe Kardashian.

Las hermanas fueron convidadas por Charles Ollivon a tomar una copa de champagne, las Santillanas les sirvieron dichas copas. Apenas tomaron un sorbo, cuando las tres quedaron dormidas, el champagne tenía un fuerte soporífero. En ese momento, los tres rugbiers se sortearon quien quesonearía a cada una. 

Carlos Gerardo (“Charly”) Lazcano Miranda sacó el papelito que decía “Kim”, su hermano mellizo Carlos Gerardo (“Carlitos”) Lazcano Miranda sacó el de “Khloe” y el francés Charles Ollivon el de Kourtney. Cada uno agarró un enorme Queso y un cuchillo, un gran cuchillo cada uno, agarrados con guantes negros. 

Las Santillanas se encargaron de atar a las tres Kardsahian, en posición semivertical, como en diagonal, sobre unos postes, comenzaron a danzar alrededor de las tres hermanas, como si fuese un ritual de unos indios, al grito de “¡Kardashian! ¡Kardashian! ¡Kardashian! ¡Kardashian!” así sin parar.

Cuando las Kardashian comenzaron a volver en sí, se aterrorizaron de estar atadas con las Santillanas danzando a su alrededor, Las Kardashian pidieron socorro, ayuda, pero fue imposible… las Santillanas practicaron con ellas toda clase de rituales lésbicos hasta que las entregaron a los rugbiers. Se abrieron los techos, de los techos, cayeron tres Quesos, tres grandes Quesos, sobre las Kardashian, los rugbiers se pusieron cada uno encima de su víctima.

Charles, Charly y Carlitos comenzaron a poner sus olorosos y gigantescos pies sobre las Kardashian, que empezaron a chuparlos, lamerlos, besarlos y olerlos, el olor a Queso que despedían los pies de cada Quesón era impresionante, las Kardashian quedaron rápidamente como atrapadas en aquellos Quesos, extasiadas, Charles, quizás por su condición de rugbier francés, tiro sobre Kourtney una botella de champagne y luego la embadurno con Queso Roquefort, sí con Blue Cheese, o Blue Fromage, fue así que se la comió toda, mordiéndola por todo el cuerpo, hasta que se la cogió en forma salvaje. 

Nuestros Lazcano Miranda, mas apegados a las tradiciones argentinas, aunque estuvieran en Francia, prefirieron no usar champagne ni roquefort, sí Charly le metió un Queso en el culo a Khloé, mientras Carlitos le metió un Queso a Kim, entonces como en una fiesta sexual de la antigua Roma, mientras Charly la cogió a Kim por adelante, Carlitos lo hizo por atrás, y Carlitos la cogió por adelante a Khloé, mientras Charly lo hizo por atrás, todo simultáneamente. Las cogidas fueron espectaculares, las Kardashian quedaron exhaustas.

Charles tomó dos grandes cuchillos, uno se lo dio a Carlos Gerardo, el otro a Carlos Isaac, Charly, o sea Carlos Gerardo apuñalo salvajemente a Kim, mientras Carlitos, o sea Carlos Isaac, apuñaló a Khloé, fue una auténtica salvajada, cuchillada tras cuchillada.

- Queso – dijo Carlos Isaac Lazcano Miranda, que tiró el Queso sobre el cadáver de Kim, la mujer a la que acababa de asesinar su hermano mellizo.

- Queso – dijo Carlos Gerardo Lazcano Miranda, que tiró el Queso sobre el cadáver de Khloe, la mujer a la que acababa de asesinar su hermano mellizo.
Así asesinaban los Mellizos Quesones, cuando Carlos Gerardo ("Charly") hacía del "matamujeres", Carlos Isaac ("Carlitos") hacía del "tiraquesos", y obviamente cuando Carlos Isaac ("Carlitos") era el matamujeres, Carlos Gerardo ("Charly") era el tiraquesos.

- ¡Mon Dieu! – exclamó Charles Ollivon, que para no ser menos, agarró un tercer cuchillo y con gran diversión para el, apuñalo en forma salvaje a Kourtney Kardashian y cuando terminó cumplió el ritual de tirarle un Queso.

- Fromage – dijo en su idioma Charles Ollivon que significa “Queso”.

Las Santillanas entonces se encargaron de preservar los cuerpos de las Kardashian, cada uno con más de cien puñaladas, para entregárselos a Lady Dumitrescu, que según dicen, los esperaba en Mónaco, a 172 kilometros de Marsella. Los Quesones fueron condecorados y finalmente celebraron el partido homenaje para Carlos Spencer, mientras donaron parte de las ganancias a la Fundación Dumitrescu.

Los mellizos Lazcano Miranda, repletos de Queso y Sangre, regresaron muy contentos a Tucumán, conscientes de haber cometido un excelente doble crimen, y que ahora ambicionaban quesonear a las hermanas Kendall y Klylie Jenner, en otro ritual para Lady Dumitrescu y con la ayuda de las Santillanas. Quizás al momento de escribir estas líneas, estas dos minas aún no fueron quesoneadas por los Mellizos Lazcano, pero quizás cuando usted lea estas líneas, sí las dos Jenner recibieron sus Quesos por parte de los sangrientos rugbiers asesinos, los mellizos Carlos Gerardo (“Charly”) y Carlos Isaac (“Carlitos”) Lazcano Miranda.

(1) https://es.wikipedia.org/wiki/Estaci%C3%B3n_de_Marsella-San_Carlos