El Asesino de Virginie Ledoyen #SkyCheese

Mientras el fenómeno del #SkyCheese llamaba la atención de varios youtubers en el Mundo, como ya relatamos en posts recientes, quiso el destino que Virginie Ledoyen y Carlinhos se encontraran en París, ella estaba en su ciudad natal, el como turista en el famoso Hotel George V, ubicado sobre la Place Vendome, y donde en esos mismos días, Carlos Alcaraz quesoneo a Vanessa Kirby. 

 

El George V no es para cualquiera, solo los ricos pueden pagar una estadía ahí, no por nada de ahí salió Lady Di la noche de la tragedia, pero los gastos y la estadía de Carlinhos lo cubría la Fundación Dumitrescu.

 

“Vienen todos los Carlos. Deberían haberle puesto Charles I en homenaje al gran Charles le grand o Karl der Grobbe (el personaje histórico conocido como Carlomagno en español)” dijo una empleada de limpieza, originaria de algún país de habla hispana.

“Fue un error, pero le pusieron así porque lo fundaron unos ingleses, la mayoría de los pasajeros que venían aca eran ingleses y George V era el rey de Inglaterra en ese momento” le contestó otra empleada de la limpieza, en un portuñol, dado que era originaria de algún país de habla portuguesa.

 

Pero volvamos al inicio del relato, ¿Quiénes son Virgina Ledoyen y Carlinhos?

Virginie Ledoyen es… Virginie Fernández (1976), es una actriz y modelo francesa. Entre sus papeles destaca Françoise de La playa, película en la que actuó junto a Leonardo DiCaprio. Ese “Fernández” en su origen revela raíces hispánicas, por lo que creemos que sabe español.

Carlinhos es… Carlos de Cobos (1988), es un jugador de baloncesto español, nacido en Brasil pero radicado en España desde los cinco años, país al que eligió representar como internacional, ha jugado en varias instituciones del baloncesto hispánico, en equipos de discreto papel como el Malaga, el Granada o el Huesca, entre otros, mide 1,92 y calza 49, es una especie de Carlos Leonel Schattmann en “versión española”.

 

Ledoyen se encontraba en su ciudad, París, donde salió a hacer algo impropio de los parisinos: visitar la Torre Eiffell. Encontrar un francés en ese lugar es como encontrar a un hincha de River en la tribuna de Boca, casi imposible, aunque puede pasar… aunque hay tickets baratos y reducidos para los residentes y Ledoyen, deseaba pasar desaparcibida, medio disfrazada, como una más de los miles y miles de turistas que visitan a diario París, y que caminan de Notre Dame al Louvre, o del Arco del Triunfo a la Torre Eiffell, los que no usan el bus turístico, claro, como hacen los chinos y los japoneses.

Ahora bien, desde lo alto de la Torre Eiffell, Ledoyen vio el fenómeno del #SkyCheese en una tarde lluviosa de París (las tardes lluviosas son moneda corriente en la capital francesa) pero creyendo que podía tratarse de una alucinación prefirió no hacer comentario alguno, no quería quedar en ridículo ante los demás. Ver Quesos en el cielo (Ciel du Fromage en francés) no es algo natural, normal ni común.

Pero se dio cuenta que también otros turistas también vieron el fenómeno, y como el 95% eran chinos y japoneses, pero hablaban en sus idiomas, Ledoyen no entendía nada…

Cerca de ella vio a un tipo alto y patón, era Carlos de Cobos. El baloncetista se acercó a la actriz, y le dijo: “Ciel du Fromage, Sky Cheese, Quesos en el cielo” 

 

“Que olor a Queso tiene este tipo” pensó Ledoyen en francés “pero que atractivo que es, será por lo del #CielDuFromage (CheeseSky en francés), no se que me pasa, me gustaría coger con el” y le dijo en voz alta en un imperfecto español “Oui, Quesos en el cielo”.

“Es verdad entonces, no me han mentido, el fenómeno esta pasando, debo entonces cumplir con mi mandato de Quesón” dijo Carlinhos.

“¿Mandato de Quesón?” le dijo Ledoyen en su imperfecto español (recordemos que su apellido original es Fernandez) “¿Y tu quien eres?”

 

“Soy Carlos de los Cobos, español, pero como nací en Brasil me dicen Carlinhos, juego al baloncesto”

“Oh, baloncesto” dijo Ledoyen “Que pies grandes y olorosos tienes” y le dijo “Quiero tener sexo contigo” y ahí Ledoyen se atajo y reaccionó: “¿Pero que estoy diciendo? ¡Me he vuelto loca! ¡No puedo decir eso! ¡Aunque sí, tengo ganas, llévame a tu hotel, Carlinhos!”

“Vamos, el George V nos espera, paga todo la Fundación Dumitrescu” le dijo Carlinhos o Carlos de Cobos, como prefieran llamarlo. Convengamos que “Carlinhos” parece hacer referencia a un “garotinho” de una scola do samba de Rio de Janeiro, mientras que “Carlos de Cobos” parece hacer referencia a un tipo hecho y derecho, o en nuestro mundo, a un Quesón, un asesino matamujeres, fetichista de los pies y tiraquesos.

 

Rato después estaban en el George V. “Yo nací aquí, tantos años viviendo en París y es la primera vez que entró en este lugar de lujo” dijo Ledoyen.

Carlinhos pidió unas botellas de champagne (no podía ser de otra manera siendo Francia) mientras que una gran horma de Queso Emmenthal, de colosal tamaño y voluminosos agujeros se encontraba sobre la mesa.

 

“¿Te la vas a comer entera?” le dijo Ledoyen

“Ja, ja, je, je, ji, ji, jo, jo, ju, ju” río Carlos “Es para el final, después de que nos divirtamos”.

Comenzó la fiesta al ritmo del repertorio completo de Edith Piaff, Maurice Chevallier y Sacha Distel para estar a tono con el lugar y el ambiente, se desnudaron mutuamente arrancándose las ropas 

 

y se tiraron las botellas de champagne, no tomaron ni un trago, ella lo baño a el y a el a ella, tras lo cual el extendió sus enormes y gigantescos pies olorosos, ella como una sumisa esclava sexual empezó a chupar, lamer, besar y oler los pies de Carlos, le encantó hacerlo, le encantó…

… pidieron más champagne, y ella se lo tiro otra vez encima y le chupo la pija…

… y mas champagne, y el se lo tiro encima y le chupo las tetas…

… y bañados en champagne tuvieron sexo, el se comporto como Zinedine Zidane en la final del 98, no erro una, todas iban adentro, y ella como Edith Piaff cuando cantaba “la vie en rose”, mucho sexo, hasta terminar y quedar contentos y alegres.

 

Descansaron un rato, Ledoyen le dijo: “¿Más champagne, Carlinhos?”

“No, ahora, llego la hora de divertirse con el Queso, te dije, que era para el final”

“Yo no quiero final, quiero que esto sea eterno, como la Place D’Etoile”

En la habitación había una ninjato. Era la misma ninjato con la Carlos Alcaraz había asesinado a Vanessa Kirby, pocos días atrás, menos de una semana. Estaba bien limpia y nuevamente afilada, reluciente, como algo que se va a estrenar, nadie

Con sus guantes negros, Carlos agarró la ninjato, e hizo una serie de malabarismos con la misma, como si tratará de una exhibición de baloncesto o de artes marciales.

 

Ledoyen observó con algún misterio aunque pensando que tras esas demostraciones, Carlos iba a cortar el Queso en muchos pedazos, pero los malabarismos continuaban ¿A que esta jugando este tipo? Pero no le preocupo ni se asusto en lo más mínimo, de lo alegre y contenta que había quedado por el sexo que había tenido.

Ninjato en mano, Carlos agarró el Queso y gritó: “¡Queeeesssooooooo!” y le tiró el Queso a la actriz.

Esta recibió el Quesazo y se lo sacó de encima, y ahora Carlos volvió a hacer una serie de malabarismos con la ninjato y gritó por segunda vuelta: “¡Queeeesssooooooo!”

 

Solo que ahora Carlos el malabarismo que hizo con la ninjato fue clavársela a Ledoyen, primero se la clavo en el pecho, atravesándole todo el cuerpo, después la saco toda ensangrentada y se la volvió a clavar, ahora en el cuello, dejándola colgada sobre la pared.

“Queso” dijo Carlos tirándole el Queso al cadáver de su víctima.

Con total impunidad, el baloncestista asesino (uno más en la larga lista de basquetbolistas asesinos y no con pocas víctimas, sino todo lo contrario, con muchos QUESOS) abandonó la escena del crimen.

Las dos empleadas de limpieza se encargaron de limpiar la escena del crimen y de proveerse de la sangre de la víctima, una, la de habla portuguesa, era Lady Garrincha, una dama brasilera, que creyó en cierta medida que con este crimen reparaba aquel papelón de Brasil en la final de Francia 1998 cuando perdió 3-0, la otra, la de habla española, era Madame Cárdenas, mexicana, que no tenía deudas pendientes con los franceses, pues había estado en las tribunas cuando México le ganó a Francia 2-0 en Sudáfrica 2010, pero igual estaba satisfecha con el “Queso”.

Horas después, el cadáver de Ledoyen apareció flotando en el Sena, desangrado, adentro de una bolsa y con el Queso metido adentro, lo descubrieron justo en el puente de Notre Dame, y no solo vieron otra vez el fenómeno del #SkyCheese caer sobre París, sino que también lo vieron al Jorobado deambular en las terrazas, junto a las gárgolas, de la mítica Catedral. Y también por ahí pasó el Inspector de la Pantera Rosa, que se hizo cargo de la “investigation”.

#SkyCheese #QUESO

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