18 Carlos Asesinos para Ravelia, la Tatuada (la saga completa)

 

aka Que fue de Couer Rouge? o la historia completa de Ravelia la Tatuada, en un único relato

Ciudad de Mar del Plata, Provincia de Buenos Aires, Argentina…

A Matías le faltaban pocas materias para recibirse de psicólogo y como parte de la tesis final con la cual obtendría el título, debía encarar el tratamiento de algún paciente, que le asignarían por sorteo.

De esta manera, le tocó en suerte, una mujer joven, de apenas 22 años, casi de su misma edad, llamada Ravelia, un nombre muy extraño, como Valeria, con las mismas letras pero en otro orden. 

Cuando Ravelia concurrió a la primera consulta, Matías quedo asombrado al verla, era una chica muy atractiva, delgada, con bellos y elegantes pies, llena de tatuajes en todo el tiempo, con poses sexys y provocativas, el futuro psicólogo no pudo evitar sentir cierta atracción por la joven.

“Hola Ravelia” dijo el estudiante avanzado de Psicología “soy Matías, en que puedo ayudarte, contame todos tus problemas, estoy acá para ayudarte, y darte todo los cuidados psicológicos que necesitas”.

“Hola Matías” contestó Ravelia “Yo soy Ravelia, pero me conocían como la Quesona, aunque como no quesoneaba a nadie, abandone ese nombre, y empecé a ser simplemente Ravelia la Tatuada, o también Couer Rouge, que en francés es corazón rojo

mira, yo tengo muchas obsesiones por eso, estoy aca, te cuento, tengo muchas redes sociales, cuentas múltiples de Twitter e Instagram, donde publico las fotos de mis pies, de mis tatuajes, a los chicos le gusta eso, y mi frase de cabecera es “Tirame un Queso”ofrezco mis servicios sexuales de este modo, 

 

así me enseño, la mujer que me crió, la Señora Dumitrescu, que Dios la tenga en la gloria, ella era la dueña de un burdel, y despues de que mi madre, una prostituta vip al servicio de grandes deportistas, fuera asesinada a puñaladas siendo yo una criatura de meses, bueno, ella me crio, y me crio muy bien, llena de ternura, amor y comprensión, 

 

pero Dumitrescu, que ya era muy anciana, se murió cuando yo tenía dieciséis años, y no me quedo otra que ejercer la prostitución, y vender sexo con mi cuerpo, mis tatuajes y mis pies, porque soy fetichista de los pies, tengo una extraña obsesión por los pies de hombres, si bien no le puedo negar mis servicios a ningún cliente, tengo obsesión por los pies grandes, los tipos con pies grandes y olorosos, me gusta tener sexo con mucho fetichismo de pies, oler, besar, lamer y chupar los pies de los tipos, bueno y aca estoy”

 

Ravelia había dicho tantas cosas fuertes que Matías estaba entre asombrado y extasiado, y apenas podía comprender algo, entonces llegó a decir “¿Y además de los pies, alguna otra obsesión por tus practicas sexuales”.

“Sí, hay una, y es muy fuerte, el nombre Carlos” contestó Ravelia.

“¿El nombre Carlos?” preguntó Matías “¿A ver eso de que se trata? ¡Contame algo mas!”.

“Tengo una obsesión con el nombre Carlos, yo veo a un Carlos, y pienso que me va a asesinar, que me va a tirar un Queso”

“¿Tirar un Queso?” preguntó asombrado Matías “¿Es que tenes hambre y sos una ratoncita que quiere comer un Queso?”

 

“Todo lo contrario” dijo Ravelia “No me gusta el Queso, no como Queso, lo detesto como alimento, pero los Quesones lo usan en sus asesinatos, ellos, los Carlos, que son todos Quesones, primero practican el fetichismo de los pies con las mujeres, ellas huelen, lamen, besan y chupan sus pies grandes y olorosos, después las asesinan a sangre fría, y finalmente tiran un Queso sobre los cadáveres de las víctimas que asesinan, de las minas que amasijan, de las quesoneadas, un Queso Gruyere, un Queso Emmental, esos Quesos de colosal tamaño, con agujeros múltiples y voluminosos”

“Estas loca, Ravelia” contestó Matías, sin darse cuenta, que haciendo una afirmación de ese tipo no podía ejercer nunca la psicología.

 

“¿Loca? Sí, loca, pero loca de amor, de pasión, por los Carlos, los Quesos y los pies de hombres, uno de ellos, alguno de estos Carlos, son decenas, me va a terminar asesinando, me va a terminar tirando un Queso, pero antes tendré sexo con el, y podré disfrutar de sus pies grandes y olorosos, decenas de Carlos, cientos tal vez, argentinos, españoles y de otras nacionalidades, que sigo a través de mis redes sociales, me encantan esos Carlos, estoy obsesionada con todos ellos y uno de ellos me va a asesinar, es mi destino, 

 

mi madre fue asesinada por un Carlos, jugaba al básquet, según me conto Dumitrescu, la apuñaló y le tiró un Queso, era Carlos Delfino, el padre del jugador de la selección, que se llama igual, y mi abuela, también prostituta, asesinada en los años 70 por el boxeador Carlos Monzón, y todas mis antepasados, asesinadas por Carlos, hasta remontarnos a la época del Imperio Romano, y más atrás también, es el karma de Ravelia (1), al mismo tiempo se me acaba el tiempo” Ravelia no paraba de hablar…

(1)    El karma de Ravelia, ver en el blog

https://cuentossangrientos.blogspot.com/2016/05/el-karma-de-ravelia-capitulo-1-queson.html

https://cuentossangrientos.blogspot.com/search/label/el%20karma%20de%20Ravelia

 

“Que mambo tenes en la cabeza, Ravelia” le dijo Matías “pero ahora comprendo todo, claro, tu madre, tu abuela, asesinadas tipos llamados Carlos, por eso tu obsesión por ese nombre, una paranoia, crees que no podrás escapar a tu destino, un destino circular, que se repite generación tras generación, pero bueno, quizás sea la última de las Ravelias, porque no tuvistes ninguna hija”

 

“¿Quién te dijo eso, Matías” contestó Ravelia “Ya tengo una hija, y se llama Ravelia, no se quien es el padre, esa noche tuve sexo con dieciocho tipos, dieciocho Carlos, todo elegidos a través de las redes sociales, fue una larga noche de invierno, muy larga noche de invierno, de esas que empiezan a las seis de la tarde y terminan a las ocho de la mañana, y esos dieciocho Carlos eran

1. Carlos Gonella, el fiscal,
2. Carlos Kramer, el padre de familia,
3. Carlos Beneitez, el abogado motoquero,
4. Carlos Costa, el militante kirchnerista,
5. Carlos Ferreira, el modelo trepador,
6. Carlos Soto, el experto en informática,
7. Carlos Keberlein, el diseñador,
8. Carlos Paglieri, el stripper,
9. Carlos Apolo, el masajista y taxi boy
10. Carlos Zalazar, el predicador religioso,
11. Carlos Habiague, el tanguero,
12. Carlos Capelletti, el rockero
13. Carlos Giacobone, el actor y modelo, 
14. Carlos Missirian, el emprendedor,
15. Carlos Quintela Dansoy, el militar,
16. Carlos Zabala, el cantor,
17. Carlos Cantero, el influencer,
18. Carlos Cáceres, actor y masajista, 

fue emocionante esa noche de sexo con todos esos tipos, no sabes como olían los pies de cada uno, primero les hacía cosquillas en los pies con una pluma, después, chupaba, olía, besaba y lamía los pies, ¡como olían!, olía sus zapatos o zapatillas, sus medias o calcetines, y después los pies descalzos, pasar la lengua sobre cada pie, oler aquellos Quesos, era magnífico, emocionante, excitante, un placer indescriptible,

después me castigaban, porque soy masoquista, me daban latigazos, patadas en el culo, en la espalda, con los pies, me tiraban el Queso encima, y después el sexo, me penetraban, fue algo excitante, me daban vuelta en la cama, algo magnífico”.

“¿Tuviste sexo con los dieciocho a la vez?” preguntó Matías.

“No, cada uno tuvo su turno, mientras me castigaban con los pies, los Quesos, los latigazos y me daban un sexo salvaje y desenfrenado, como un búfalo en celo, cada uno me contaba sus experiencias, 

el predicador religioso, Carlos Zalazar, por ejemplo, me recitaba frases bíblicas, recuerdo una que decía “Bienaventurados los pobres en espíritu, pues de ellos es el reino de los cielos”, Mateo 5,3

el tanguero, Carlos Habiague me cantaba los tangos, me dedicó el tango “Chorra”, ese que dice “¡Chorros! Vos, tu vieja y tu papá” y también “Amablemente” que habla de como un tipo apuñala a una mina con 37 puñaladas

el rockero, Carlos Capelletti, las letras de Coralies, no eran gran cosa, solo servían para un recital gratuito en el Parque Centenario

el influencer, Carlos Cantero, las huevadas que publica en Instagram y TikTokker, que pueden ser divertidas para los pibes y las pibas de la secundaria, pero para alguien como yo, con una vida tan sufrida, es diferente

el cantor, Carlos Zabala, me cantaba sus canciones, pero como a mí no me gustaban, le pedí que me cantara las de Sandro y Sergio Denis, y la verdad, lo hacía muy bien

el padre de familia, Carlos Kramer, me hablaba de sus hijos, llamados Carlos Agustín y Charles Thomas

Carlos Gonella, de la fiscalía, por cierto, investigaban asesinatos de mujeres que nunca se resolvían, todos cometidos por Quesones, 

el stripper, Carlos Paglieri, me daba un streap tease, lo mismo el otro masajista, Carlos Apolo

Carlos Kramer, padre de familia, me hablaba de sus pibes, ese es el más alto de todos, medía como dos metros, y que patas tiene, 

Carlos Costa, el militante kirchnerista, me repetía las cadenas nacionales de Cristina Fernández de Kirchner,

así con cada uno, cuanto más sexo, más ganas tenía de seguir, era como si con cada relación me diera más energía y fuerza sexual, 

la foto que Carlos Sebastián Beneitez tiene publicada en su Instagram, donde usa el seudónimo de @bernabe_velazquez

el mejor de todos fue Carlos Sebastián Beneitez, el abogado motoquero, que me dijo cuando pase todo esto, te asesinaré con un cuchillo grabado con el nombre de la víctima, eso sí, primero me serviría un Queso y me diría QUERES QUESO?”

“Ahí esta el asunto” le dijo Matías “no te asesinaron fue solo diversión sexual, no paso nada, no hay nada que temer, debes superar el trauma que significo el asesinato de tu madre y punto, iniciaremos un tratamiento severo y eficaz, aplicando las teorías de Freud, Jung y Piaget”.

“No” dijo Ravelia “Me van a asesinar, no lo hicieron esa noche, porque debía quedar embarazada y tener descendencia, no ser la última de las Ravelias, después de eso, estuve nueve meses haciendo una vida casta y pura, hasta que nació la niña”

“¿Y donde esta la niña’” preguntó Matías.

“Criandose bajo los preceptos cristianos, con sor Guadalupe Coromoto, la hermana menor de Dumitrescu, una monja muy buena, ejemplo de caridad y bienaventuranzas, el camino de las Ravelias continuará”.

“¿Y pensás que uno de esos Carlos, te va a asesinar?” le preguntó Matías.

“No tengo dudas, uno de ellos, lo hará” dijo Ravelia “Y será esta noche, no tengo dudas, por eso publique esto en Instagram y Twitter” y le mostró el teléfono

Matías vio las publicaciones de Ravelia y eran claras y contundentes,

“Asesinada esta noche seré, y el asesino Carlos se llama”

“Un Queso me tirarán, quesoneada seré, me quesoneará un Quesón”

“Tirame un Queso”

“Dieciocho Carlos hay y uno de ellos me asesinará”

Y todas cosas así, parecidas, en sus cuentas, raveliatatuada1, soylatatuada31, couer_rouge, couerrouge31, y todas las combinaciones posibles, la denominación de “Quesona”, que usaba al principio, la abandonó, porque las Quesonas son asesinas, y Ravelia era incapaz de matar a una mosca (aunque había fantaseado asesinar a dos seguidores suyos, el muchacho F y José Carlos Verano Morón, el Imigrante rap, pero eran solo fantasías) 

  https://cuentossangrientos.blogspot.com/2017/11/el-rap-de-la-quesona-la-asesina-del.html

“Nadie te va a asesinar Ravelia” le dijo Matías “son imaginaciones tuyas, uno de ellos, o tal vez, varios, o tal vez todos, es el padre de tu hija, la que esta con la monja, la hermana menor de Dumitrescu”

“No tengo escapatoria, Matías” dijo Ravelia “Y será esta noche, ya huelo el Queso que me van a asesinar”

“Olvidate de eso” dijo Matías “No serás asesinada, ¿Qué tal si tenemos sexo? Nos podemos divertir”.

 

“No, de ninguna manera” dijo Ravelia “No te llamas Carlos, no oles a Queso, no me interesan tus pies, yo lo hago con los Carlos, con los Quesones”

“Al principio me dijistes que ofrecías tus servicios sexuales a cualquiera, bueno, aca estoy yo, calzo 46, tengo pies grandes y olorosos, soy un Matías, eso sí, no un Carlos, pero bueno, la vas a pasar bien”

“No, después de esa noche, ya no pude tener sexo con otros hombres que no se llamen Carlos, de hecho, ni siquiera tuve sexo, soy pura y casta, esperando el sacrificio de ser asesinada y que me tiren un Queso, un Queso”

“No sos un Quesón, no te llamas Carlos, no quiero tus pies” le dijo Ravelia a Matías.

 

En ese momento, Ravelia se paró de repente, y huyó del consultorio, Matías quedó solo, pensativo, sin saber si todo eso era real, se vio sus pies, eran grandes, lindos y olorosos, bueno quizás no tan olorosos pero sí muy atractivos, sabía que no podía ser Quesón, pero quizás sí un Quesudo, Matías Quesudo, sí, así podría denominarse…

Todo esto ocurrió en Mar del Plata, Matías regresó a su departamento, en un edificio en Playa Grande, casi inhabitado fuera del verano, y empezó a contemplar el mar, mientras pensaba en Ravelia, finalmente se quedó dormido, y soño con Ravelia, el le ofrecía sus pies, pero ella lo rechazaba “No sos un Quesón, no te llamas Carlos, no quiero tus pies” le decía Ravelia, y Matías de despertaba, volvía a dormirse y otra vez soñaba lo mismo.

Finalmente las luces del amanecer llegaron y Matías, medio dormido, contempló el amanecer en el mar, viendo la vista desde Cabo Corrientes a Punta Mogotes, con las escolleras del puerto en el medio, desde Playa Grande…

Matías tomó un café con leche y salió a caminar, bueno, escribiría la tesis sobre Ravelia y punto, era solo una paciente, y empezó a caminar, y a trotar, y a correr, sobre la costa, y de repente, ahí, entre Playa Grande y Playa Chica, vio lo que nunca hubiera querido ver…

El cadáver de una chica, totalmente desangrado, con múltiples heridas en todo el cuerpo, y un enorme Queso encima, Matías lo vio y sí, no lo podía creer, pero era ella, era ella, era Ravelia…

“¡Ravelia! ¡Ravelia!” gritó de terror Matías “¡La asesinaron! ¡La quesonearon!” y preso del pánico, fue a buscar a la policía.

Las fuerzas policiales no tardaron en llegar, el Comisario Miguel dijo que nunca había visto algo así y el informe del forense, el doctor Chiang Kai Wo, fue contundente “es como si la hubieran asesinado dieciocho veces”. 

 

Matías no podía creer lo que estaba oyendo. Dieciocho veces y de múltiples formas, Matías le dijo al Comisario Miguel

“Yo sé quien es el asesino, se llama Carlos”

“Bueno pibe, vamos a la comisaría, así nos decís quien es el asesino”

Y Matías, en la comisaría, efectuo su declaración…

Eso sí, antes de empezar todo sobre la mesa del Comisario, dieciocho fotos de dieciocho Carlos, los dieciocho asesinos de Ravelia…

 

El Comisario empezó a ver las fotos, mientras googleaba los nombres con dos computadoras y dos celulares, Iphone, no podía ser otro, para alguien de su alcurnia

“Os escucho, Matías” dijo el Comisario “¿Quién es el asesino?”.

“El asesino es el fiscal Carlos Gonella. La visitó a Ravelia esta noche, y le regaló un Queso, ahí, mientras le contaba los problemas de la fiscalía, ella olio los pies del fiscal, y ahí, este le clavó el cuchillo, tres veces lo hizo, tres mortales heridas, una en el cuello, otra en el estomago, otra en el pecho, y tras hacerlo, le tiró un Queso”

el relato de Carlos Gonella y Ravelia la Tatuada

“¿El fiscal Carlos Gonella, el asesino?” dijo el Comisario “¿Sabes lo que estas diciendo? Es una de las personas más respetables de nuestro poder judicial. Ha hecho unas investigaciones barbaras sobre asesinatos de mujeres. Aunque bueno, este Carlos Gonella tuvo varias esposas, se caso como ocho veces, y todas fueron asesinadas, y les tiraron un Queso, que se yo, todo puede ser”

el relato de Carlos Kramer y Ravelia la Tatuada

“Bueno, el asesino pudo ser tambien Carlos Kramer, un ejemplar padre de familia, ejecutivo de una multinacional, el tipo participo de un casting de Popstars hace unos años, es alto, mide como dos metros y tiene pies de basquetbolista”

“¿Y por haber estado en un casting, este Carlos Kramer se volvió loco y un día agarro un cuchillo y fue y asesino a Ravelia, no tiene lógica pibe. Aunque viendo en Google, observo que este Carlos Kramer asesinó a su esposa despues de descubrir una infidelidad, un ejemplar padre de familia que asesinó a Paula Pestarino, su esposa, a cuchillazos y le tiró un Queso”

“Es que Ravelia se hizo fan de el despues de verlo en el casting y lo empezó a acosar en las redes, el tipo descubre que la mujer le mete los cuernos, se vuelve loco y la acuchilla, y le tira un Queso, le echa la culpa a Ravelia de todo, y por eso la termina asesinando, llega a la casa, aca en Mar del Plata, la visita y la termina acuchillando, le tira el Queso”

 

“Tiene cierta lógica” dice el Comisario Miguel “vaya veo que la esposa de Carlos Kramer le metió los cuernos con Carlos Gonella, que quilombo todo esto”

“Otro sospechoso es Carlos Sebastián Beneitez” prosiguió Matías su relato “conocido en las redes como el Queson de Pehuajo o simplemente, el Asesino del Queso, un abogado motoquero, Ravelia lo conoció de casualidad mientras hacía un trámite y desde entonces lo acosaba en las redes”

“Muy interesante” dice el Comisario Miguel “esta piba acosaba a todos los Carlos, vaya veo que este Beneitez tuvo tres novias y las tres fueron asesinadas, pero que cosas che”

 

“Y hay muchos más, cualquier pudo haber sido. Beneitez la visitó y la apuñaló, imaginó la escena, Beneitez vestido con un traje antiguo diciendole a Ravelia, Queres Queso?, y tras eso, la apuñala con un cuchillo grabado con el nombre de la víctima”.

 

 el relato de Carlos Sebastián Beneitez y Ravelia la Tatuada

“Ravelia acosaba a todos los Carlos por las redes” dijo el Comisario Miguel “¿Y quien más sigue?”

“El que sigue es Carlos Costa, Charly el 22, en las redes, hincha de Vélez y militante kirchnerista, tuvo muchos encuentros sexuales con Ravelia, y ella lo incitaba a cometer asesinatos, por encargo de Ravelia,

Carlos Costa fue asesinando a cada una de las prostitutas rivales de Ravelia, finalmente Carlos Costa se tomo venganza de Ravelia por haberlo convertido en un asesino, y la termina apuñalando y le tira un Queso”

“Es cierto eso, cinco prostitutas fueron asesinadas a cuchillazos, y les tiraron un Queso, este Carlos Costa pudo ser ese asesino, muy interesante”.

el relato de Carlos Costa y Ravelia la Tatuada

La fan fiction de Carlos Matías Ferreira Paparamborda y Ravelia, la Tatuada

“Claro que hay otras variantes. Tambien esta la de Carlos Matías Ferreira Paparamborda, el uruguayo que se hizo conocido por publicar sus pies en el sitio Pies Masculinos, ahí lo conoció Ravelia, el tipo era un taxi boy, muy ambicioso y trepador, pudo sentir que Ravelia lo acosaba y bueno, la asesinó a balazos, con una ametralladora”

“Aca hay otra arma, cambian las cosas” señaló el Comisario Miguel “bueno el chino este que es forense dijo que además de las puñaladas y los cuchillazos, hubo heridas de bala, puede ser”.

el relato de Carlos Miguel Soto y Ravelia la Tatuada

“Sí, cambia, como cambia con otros dos asesinos, quizás los menos conocidos en esta historia, el experto en informática Carlos Soto y el diseñador Carlos Keberlein. Ravelia los conoció porque los dos chabones publicaban sus fotos en las redes, y ella los empezó a seguir porque se llamaban Carlos, solo por eso.”

el martillo sangriento que uso Carlos Keberlein en el asesinato

“¿Y estos la podrían haber asesinado entonces?” dijo el Comisario “A verlos, medios boludos, no creo”

“Sí, también son asesinos. La pudieron haber visitado esta misma noche. Ninguno podría haber usado cuchillo. Carlos Soto la asesinó con un taladro y Carlos Keberlein a golpes con algún objeto contundente, un martillo por ejemplo…”

el relato de Carlos Enrique Keberlein y Ravelia, la Tatuada

“Concuerda con el informe forense, hay rastros de heridas con martillo y taladro, puede ser… medios salvajes esos asesinos, me gustaba más Beneitez con lo del cuchillo con el nombre de la víctima, era más elegante”

“Pero estos dos no eran asesinos anterioremente, como los otros, que tenían otros asesinatos, aunque impulsados por Ravelia, por eso pueden haber actuado en una reacción repentina, movidos por un impulso inesperado, agarraron el martillo o el palo de hockey y zas, chau Ravelia” 

Charlie Gabriel y Charlie Paglieri, dos strippers para quesonear

“Muy interesante, pero hay más asesinos, ¿Qué tal este Carlos Paglieri? Stripper, tiene pinta de asesino serial, le queda bien el papel, rubiecito, el asesino ideal para la chica ideal”

el relato de Carlos "Charlie" Paglieri y Ravelia la Tatuada

“Ese seguro cometió varios asesinatos, un gran Quesón” dijo Matías “Podría haber usado una lanza para asesinar a Ravelia, y asesinarla de un lanzazo, casi empalada. Le dio un streap tease, la convido con unos buenos whiskys, y al ritmo de una buena música tropical, zas, el lanzazo, que crueldad, muy cruel”

“Que crueldad, pero que sanguinario, y el otro stripper, también masajista, Carlos Gabriel Apolo, por ejemplo, conocido en las redes como Charlie Gabriel”

 el relato de Carlos Gabriel Apolo y Ravelia la Tatuada

“Sí, Charlie Gabriel, así lo conocen, la katana, esa arma, la katana, la que uso Carlos Delfino para asesinar a Valeria Mazza, a Zaira Nara y a las demás, o Carla Romanini para asesinar a Matías Almeyda, la katana, este Charlie Gabriel usó la katana para asesinar a Ravelia, no la decapitó, como sí hizo Carlos Delfino con Valeria Mazza, la atravesó de un katanazo en el cuerpo, como sí hizo Carla Romanini con Matías Almeyda, así la asesinó, disfrazado de karateka o judoka, vestido a la manera oriental, un katanazo certero y eficaz”

“También esta el Quesón del Tango, Carlos Habiague, me imaginó la escena del crimen, en medio de los tangos, bailando alguno, al estilo Amablemente, el tipo saca un cuchillo y le da treinta y siete puñaladas, otra vez un apuñalamiento, como con Carlos Gonella, Carlos Kramer, Carlos Beneitez o Carlos Costa”

El Relato de Carlos Habiague y Ravelia la Tatuada

“Sí, pero sin cuchillo, con un machete, para ser algo más original, Carlos Habiague pudo haberla asesinado con un machete, mientras le cantaba un tango, ese tango, que menciona usted, Comisario”.

“Los asesinos siguen. Tenemos a Carlos Capelletti, el rockero de la banda Coralies y a Carlos Zalazar, el predicador religioso, un místico cuya única actividad en la vida es leer la Biblia”

el relato de Carlos Capeletti (el Quesón Rockero) y Ravelia la Tatuada

“Así es, Ravelia conoció a Carlos Capelletti en las redes y luego fue a verlo a un recital gratuito en el Parque Centenario, Ravelia le dijo que no le gustaba la banda Coralies, que tenía que ser cover de Soda Stereo y de Virus, y que solo le interesaba los pies de Carlos, porque como se llamaba Carlos, debían oler muy fuerte, al rockero le gusto y tuvieron sexo, pero despues se canso del acoso de Ravelia y bueno, pasado un tiempo, la acribillo a balazos con un silenciador estilo Charlie Reich, la visitó en su casa y así a balazos la despacho y un Queso le tiró, usando un silenciador, como estilan los Quesones en estos casos,

 el relato de Carlos Samuel Zalazar y Ravelia la Tatuada

y en cuanto al predicador, a Carlos Zalazar, un gran estrangulador, al que conoció gracias a la web de PiesMasculinos, porque este Carlos, era muy bíblico, pero le gustaba publicar fotos de sus pies, y así mientras recitaba las frases de la Biblia, este Carlos agarró un par de medias y la estranguló, a sangre fría, ¿Por qué pudieron haberla asesinado? Vaya uno a saberlo, pero por la misma razón que los demás, el acoso que sufrían por parte de Ravelia

la advertencia de Carlos Quintela Dansey

“Esa es la razón esgrimida por todos. Este militar, Carlos Quintela Dansoy, lo vieron esta noche en la base naval del Puerto, pudo haberla llevado a Ravelia hasta ahí y ejecutarla a sangre fría, a balazos, usando un revolver con silenciador, una suerte de fusilamiento, bien al estilo militar, en forma seca, sin emociones, como quien cumple una orden, ocho balazos y un Queso

el relato de Carlos Quintela Dansey y Ravelia la Tatuada

el influencer Carlos Cantero, el chico misionero que publica cosas en Instagram y TikTok, conocido como “Carlitos Cantero”, ese de haberla asesinado, debe haber usado dos cuchillos”

el relato de Carlos Iván Cantero y Ravelia la Tatuada

“Dos cuchillos, otro crimen inspirado en los de Carla Romanini, que asesinó a Matías Candia con dos cuchillos, y despues le tiró el Queso, sí, así, pudo haberlo hecho Carlos Cantero, de la misma forma, solo que en este caso, el asesino es un hombre y la víctima, una mujer…”

“Bueno, nos quedan cuatro Carlos, Carlos Gabriel Cáceres, Carlos Luciano Raúl Giacobone, Carlos Alberto Zabala y Carlos Ariel Missirian, la misma cantinela, todos acosados por Ravelia a través de las redes, lo mismo, fueron a asesinarla por el simple hecho de llamarse Carlos”.

el relato de Carlos "Carlix" Zabala y Ravelia la Tatuada

“Sí, Carlos Zabala, el cantor, la asesinó tirándole puñales estilo circo, así de esa manera, le fue tirando los puñales uno por uno, pero acerto en todos, como un número circense, pero con estilo Quesón

el relato de Carlos Ariel Missirian y Ravelia la Tatuada

Carlos Missirian fue más practico, apenas unos balazos, ¿para que molestarse con un cuchillo?, claro que Missirian pudo haber sido un sicario que actuo contratado por un no Quesón, tocayo de Oberto, que deseaba vengarse de Ravelia, en una historia censurada que alguna vez se publicó en el blog, y que no mencionaremos

el muchacho F (tocayo del basquetbolista Oberto) acosaba a Ravelia en las redes, pero esta lo despreciaba porque no se llamaba Carlos, y publico entonces una historia donde ella lo asesinaba a balazos y le tiraba un Queso, pero no un Queso cualquiera, un Queso Roquefort, símbolo de la deshonra y la vergüenza (ver el relato de Carlos Ariel Missirian y Ravelia la Tatuada)

molesto por la ficción donde lo asesinaban y le tiraban un Queso, el muchacho F (tocayo del basquetbolista Oberto), contrata a un asesino profesional, un sicario Quesón, Carlos Ariel Missirian, para asesinar a Ravelia (ver el relato de Carlos Ariel Missirian y Ravelia la Tatuada)

 

Carlos Ariel Missirian ejecuta el crimen y asesina a Ravelia, contratado por el muchacho F, como dato de color diremos que Missirian es admirador de Carlos Melia, el Quesón Gay, del que se considera su discipulo directo (ver el relato de Carlos Ariel Missirian y Ravelia la Tatuada)

el que sí uso cuchillos fue Carlos Gabriel Cáceres, despues de unos buenos masajes, a este actor y masajista, también lo conoció por la página PiesMasculinos, una gran proveedora de estas cosas”

¡Y como disfrutó Ravelia de los pies gigantescos y olorosos de Carlos Gabriel Cáceres!

Carlos Gabriel Cáceres y Ravelia la Tatuada, otra versión del asesinato, leela en el relato de Carlos Gabriel Cáceres y Ravelia la Tatuada

“Nos queda entonces el último, Carlos Luciano Raúl Giacobone”

“Sí, la escena de ese asesinato fue diferente, el asesino esperaba a Ravelia en las sombras, esta estaba hablando por teléfono, y el la tomó del cuello y empezó a estrangularla con una media, pero Ravelia se defiende, toma unas tijeras y…

 el relato de Carlos Luciano Raúl Giacobone y Ravelia la Tatuada

“Apuñala al asesino, el asesino se convierte en víctima, y la víctima en asesina, como en la película de Hitchcock Dial M for Murder, así de esta manera…, en esta hipótesis gana Ravelia, el Quesón se convierte en Quesoneado y la Quesoneada se convierte en Quesona.

“Así debió haber sido, pero esto es un Relato Quesón, y los Quesones siempre ganan, entonces Giacobone logra salir ileso del ataque con tijera de Ravelia, la sujeta del brazo, le saca la tijera y ¡paf! el insiste en rodearle el cuello con la soga, y ahí, la estrangula… Ravelia no tiene escapatoria, y es asesinada”

Una foto que Ravelia la tatuada le envio a uno de los Carlos, cuando aún se hacía llamar la QUESONA ASESINA, pero no asesinaba ni quesoneaba a nadie, aunque si la asesinaban y quesoneaban en el intento

“¿Pero entonces Ravelia fue asesinada dieciocho veces en una misma noche?”

“Por supuesto, Comisario, y todos repitieron el mismo ritual despues de asesinarla, le tiraron un Queso, diciendo en voz alta la palabra QUESO, así, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO, QUESO"

"Dieciocho Carlos, Dieciocho Quesos" dijo Matías.

Matías hablando con el comisario

El Comisario Miguel entonces contemplo a Matías y le dijo:

“Muy bien pibe, lindo relato de fantasía, yo creo que vos sos el asesino, por eso inventaste todo esto”

“No puedo ser el asesino, no me llamo Carlos, me llamo Matías, el asesino se llama Carlos, solo tuve la visión de como fueron los dieciocho asesinatos, porque Ravelia dieciocho veces fue asesinada en una misma noche”

el Comisario Miguel

“Si, si, ya me lo dijistes, pobre chica esta Ravelia, yo la conocía desde que era chica, fui un gran cliente del burdel de Dumitrescu, estaba aca, cerca de Cabo Corrientes, que dama respetable era esa señora rumana, ella dueña de burdel y la hermana menor se metió a monja, pero esta Ravelia siempre fue media loca y bueno, quizás en una noche de sexo, te pasastes un poco y la terminastes asesinando, Matías”

“Ni siquiera tuve sexo con ella” dijo Matías “Me quieren culpar de un crimen que no cometí, soy inocente”.

la casa de Dumitrescu, donde funciono el burdel hasta principios de los 90 (luego se mudó a otro lugar), y donde vivió Ravelia, y seguramente el lugar donde fue asesinada y quesoneada, Gascón y Carlos Pellegrini, Mar del Plata, a escasos metros de la costa, obviamente la calle debía hacer referencia a los "Carlos" (sí la hacemos, la hacemos completa) (foto del autor del blog)

“Bueno, mira, dejemos todo como esta, nadie reclama el cuerpo de esta Ravelia, dale cristiana sepultura, y olvidemos el tema, yo archivo la causa, no voy a incriminar a esos dieciocho Carlos ni tampoco a un perejil como vos, archivo la causa y listo, total yo me quedo con la casa de Dumitrescu y la vendo a buen precio, ese es el trato, seguro hacen una torre de departamentos ahí, voy a ganar una fortuna, tengo el testamento de Dumitrescu, todo legal”.

“Usted es la corrupción policial en persona” dijo Matías.

“Y vos sos un fesa, pibe, cuando vos llegastes a Moscú, yo ya fui y volvi veinte veces” dijo el Comisario Miguel “Pero me caes bien. Se me ocurre algo mejor. Mira para quedar bien con los medios y , te acuso del crimen bajo el seudónimo de Matías Quesudo, y pido tu captura, pero al mismo tiempo, te doy un plazo de veinticuatro horas para irte de aca, Londres es un buen lugar, anda para allá pibe”.

 

“¿Y el pasaje? ¡No tengo un mango! ¡Ni siquiera tengo pasaporte para salir del país” dijo Matías.

“Eso es lo de menos, aca tenes el pasaporte, ahora vas a ser Matt, Matthias David Lancaster, así te llamarás, súbdito británico, y mañana a las doce, salís a Londres, vía Madrid, despues te acuso del crimen y serás eternamente profugo, pasados unos años, si queres, podes volver, la causa prescribe o bien buscaran a Matías Quesudo, y vos sos Matthias David Lancaster, ja, ja, así resuelve los casos policiales el inefable Comisario Miguel, ja, ja”.

Matías acepto todo y cumplió todo lo que dijo el Comisario Miguel. Y se afincó en Londres, como Matthias David Lancaster, y para hacer honor al apellido, vivía en un pequeño atico cerca de Lancaster Gate, estación de metro de la Central Line. En Londres, y como homenaje a Ravelia, se convirtió en fetichista de los pies, y empezó a publicar fotos de sus pies, que se hicieron muy populares en las redes sociales, desde Londres podes dominar el mundo, pero esa es otra historia, la historia de Matías Quesudo, que quizás algún día contaremos.

las fotos de MATÍAS QUESUDO, ya afincado en Londres, lindos, bellos y grandes pies, sin embargo, Ravelia lo despreció porque no se llamaba Carlos

Hoy hemos contado la de Ravelia, la Tatuada, dieciocho veces asesinada por dieciocho Carlos distintos, y que su legado y recuerdo permanezca siempre con nosotros. 

el monumento que recuerda a Ravelia, en la costa de Mar del Plata, entre Playa Grande y Playa Chica, el lugar donde encontraron el cadaver (foto sacada por el autor del blog)

 

 

 

 

 

Un extraño y misterioso monumento, emplazado en el mismo lugar donde encontraron su cadaver,  honra la memoria de Ravelia.  

Que así sea y eternamente lo sea.

 

Los 18 CARLOS ASESINOS DE RAVELIA