El Asesino de Andrea Ghidone
Era una noche cualquiera, Andrea Ghidone estaba durmiendo, cuando de repente, escuchó un ruido, y a continuación, pasos como si alguien caminara en el lugar.
Asustada, abrió los ojos, prendió la luz, y para su sorpresa, sobre la mesa de luz, había un enorme Queso, de grandes y voluminosos agujeros, aterrorizada al ver el Queso, dio vuelta la cabeza y vio que un hombre joven, alto y patón estaba allí.
Enfrente estaba Carlos “Charlie” Reich, el famoso modelo y asesino, conocido en la jerga de los Quesones como “el Quesón del silenciador”, y precisamente la estaba apuntando con un revolver con silenciador.
Aterrorizada, Ghidone comenzó a gritar y sollozar, además de rogar al asesino:
- ¡Piedad! ¡Piedad! ¡Piedad! ¡No me asesines!
- ¿Y porqué no he de hacerlo? – dijo Charlie – Soy un asesino, asesiné a Pampita, a Nicole Neumann, a Mariana Fabbiani, y a muchas minas más… no tengo razón para no asesinarte.
- ¡Por favor! ¡Estoy dispuesta a hacer lo que sea!
- Perfecto. Chupame y oleme los pies entonces.
Ghidone creía haber oído mal y pensó “¿Chupame los pies? ¿No habrá querido decir chúpame la pija?”, entonces, siempre arrodillada, y con el revolver sobre su cabeza, le dijo a Charlie:
- ¿Los pies? ¿Queres que te chupe los pies?
- Sí, así es, toma, sácame los zapatos, las medias, y chúpame los pies.
Ghidone eso hizo. Y la verdad que disfrutó mucho. Los pies de Charlie olían a Queso, de una manera fuerte e intensa. Ghidone los olió, lamió, besó y chupó. Cuando terminó, Charlie le dijo, sin dejar ni un momento de apuntarla con el revolver:
- Chupame la pija.
Le chupó la pija, después tuvieron sexo, el la penetró por adelante, por atrás, y cuando terminaron, Charlie le dijo:
- Ahora sí, Andrea Ghidone, lo siento, pero debo cumplir con la orden.
- ¡Noooooooooooooooooo! – gritó desesperada Andrea Ghidone, pero ya nada pudo hacer.
El asesino disparo seis veces, y cada vez que disparaba decía en voz alta “Queso”. El primer balazo impactó en el cuello, el segundo en la teta derecha, el tercero en la teta izquierda, el cuarto en el cráneo, el quinto en el estomago y el sexto, en el abdomen. Al terminar, el asesino tomó el Queso y lo tiró sobre el cadáver de Andrea Ghidone diciendo en voz alta:
- Queso.
Carlos “Charlie” Reich, el Quesón del silenciador, el lugar del crimen abandonó.
esta bueno... transmite la sangre fría del asesino y el terror de la víctima
ResponderBorrarBien. Un asesino tan frío que ni el despliegue sexual de Andrea Ghidone sirvió para que le perdonaran la vida.
ResponderBorrarSexo y un inevitable aunque postergado asesinato, la esencia de un quesón.
Una atención así se merece Kate Moss, sino del quesón, de otro.
Podría agregarse una villana científica, como promotora de las quesoneadas. Podría estar relacionada con tecnología de la clonación. Podría ser una impulsora de que las Carlas quesoneen, que pueden hacerlo tan letalmente como los quesones hombres. Y podría estudiar las ondas cerebrales, con un casco inalambricos, de Carlos Y Carlas mientras quesonean.
ResponderBorrarPodría ser un personaje ficticio. O basarse en la científica Alice Roberts, muy acostumbrada a trabajar con huesos, calaveras, a reconstruir esqueletos. Con apariencia agradable, pero en el mundo quesón podría tener un lado oscuro. Cuando hace documentales suele ser bien recibida por tribus de África.
Podría haber un doble crimen queson inspirado en esto
ResponderBorrarhttps://bonitasargentasydelmundo.blogspot.com/2019/03/melina-pitra-4-y-claudia-ciardone-9.html