La asesina de Charles Jennings
Ocurrió un día después de asesinar a Charles Walrant. No habían pasado ni veinticuatro horas del asesinato de Charles Walrant y Ravelia la Quesona Asesina ya estaba sedienta de sangre. Deseaba cometer otro asesinato.
Con el objetivo de calmar su furia criminal, la Quesona abandonó Londres y se dirigió a un pueblo de la campiña inglesa. No sabía ni donde estaba. Vio una estación que se llamaba “Crew” y ahí se bajó, ingresando en el pueblo cercano.
Se estaba jugando allí un partido de cricket, entre Reds Crew y Blue Crew, dos equipos regionales. Aunque era un día de semana, muchos eran los que estaban viendo aquel partido.
La Quesona no podía con su instinto criminal y observó que un joven de unos veintitantos años era el que debía manejar el tablero de resultados.
Oyó su nombre: Charles Jennings. Se llamaba Charles, como su anterior víctima. Tuvo de repente unas ganas de asesinarlo que no pudo parar. Y la Quesona logró lo que quería: guantes negros, un Queso y una daga.
El partido de cricket entre Reds Crew y Blue Crews se estaba desarrollando con normalidad, mientras Charles Jennings indicaba desde su cabina los tantos de uno y otro equipo. Ocurrió en ese momento, que el equipo Reds marcó un out, Charles se apresuró a poner el resultado en el marcador. Distraído, no se dio cuenta que una mujer ingresó a la cabina.
La mujer era Ravelia y llevaba una daga en sus manos. Sin mediar palabra alguna, en forma sigilosa y sin que Charles la advirtiera, la chica, daga en mano, se acercó a donde estaba el muchacho. Entonces, Valeria levantó la daga y lo apuñaló en la espalda.
El muchacho quedó muerto casi de inmediato, sin poder reaccionar al no advertir la presencia de su asesina. Entonces rápidamente la Quesona le tiró el Queso.
- Charles Jennings. Queso – dijo Ravelia entonces en voz alta, abandonando rapidamente la casilla, sin que nadie la viera ni la advirtiera.
Al ser asesinado, Charles Jennings se desplomó sobre la mesa, y así alteró el marcador, que del 95-94 se alteró hasta señalar un 100-100.
Los jugadores de ambos equipos vieron la escena, y detuvieron el partido, Pufrock y Hastings ingresaron entonces a la cabina y encontraron asesinado a Charles.
Al contemplar la escena, Pufrock gritó:
- Is dead! They have killed him! He has a dagger stuck in his back! That girl is the murderer! (¡Está muerto! ¡Lo han asesinado! ¡Tiene un puñal clavado en la espalda! Esa chica es la chica!)
Pufrock observó hacia afuera y vió a ravelia huir. Por eso dijo lo de la “chica rubia”. Lo cierto es que Ravelia huyó, dotada de una enorme fuerza y aprovechando la confusión existente en el pueblo, logró huir hasta la estación y se subió al tren a Londres.
Nota de Carlos Quesón: este Relato esta basado en el Episodio "Dead Man's eleven" de la serie "Midsommer Murders", de la TV Británica, de principios del siglo XXI, y que en Argentina se emitía por señales de clave; en el mismo, un personaje (Charles Jennings) era asesinado por una mujer con un cuchillazo en la espalda.
este es un fragmento de una historias más larga?
ResponderBorrarImplacable la Quesona
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