El Asesino de Martina Soto Pose
“No disfruté mucho mi trabajo en CQC” declaró Martina Soto Pose a un medio. En la nota, Soto Pose declaraba que su mundo era la radio y renegaba de todos sus trabajos en el ámbito televisivo. Era un tiempo en el que el mundo de los ex CQC estaba conmocionado: Daniel Tognetti y Daniel Malnatti habían sido asesinados a golpes con un palo de hockey y una chica era la principal sospechosa. Todos buscaban a la asesina.
“No soy la asesina. Soy inocente. Ya no contestaré más preguntas. De ahora en más hablará mi abogado” dijo Soto Pose a los medios. Efectivamente, ella no era la asesina pero su rechazo a su pasado en CQC la convirtieron en sospechosa.
Martina dejó su rutina habitual en las radios y regresó a su departamento. Entró como cualquier otro día. Solo iba a estar un rato para bañarse y cambiarse, y concurrir después a otro evento de vital importancia. No importa cual.
Fue a la ducha, se baño y salió de la misma. Soto Pose comenzó a notar un olor muy fuerte e intenso en su departamento. Era olor a Queso. Se dio vuelta y para su sorpresa, sobre una mesa, había una enorme horma de Queso Emmental, que sobresalía por sus grandes agujeros.
- ¿Y este Queso? ¿De donde salió?
- Te lo envían los ex CQC ja ja ja – se escuchó una voz de hombre.
Soto Pose se asombro al ver frente a ella a Carlos “el Chapa” Retegui, ex jugador de Hockey y Campeón Olímpico con Los Leones en #Rio2016. Tenía unos guantes negros y sostenía un palo de hockey.
- Yo te conozco – dijo Soto Pose – vos sos Carlos Retegui, el del Hockey.
- Soy yo. Y aca estoy. He venido a hacer justicia.
Carlos levantó el palo de hockey para atacar a Soto Pose, que horrorizada retrocedió unos pasos.
- ¡Vos sos el asesino! ¡Vos asesinastes a Malnatti y a Tognetti!
- De ninguna manera. Soy un asesino. Pero un asesino de mujeres. Soy un Quesón. A esos dos tirifilos los asesinó Carla Rebecchi, ja, ja.
Soto Pose se arrodilló e imploró piedad al asesino, que estaba dispuesto a asesinarla.
- ¡Piedad, Carlos! ¡No me asesines! ¡No me asesines!
- Chupame y oleme los pies – declaró con frialdad el asesino.
- ¿Quéeeeee? – dijo Soto Pose.
- Ya te lo dije.
La ex notera de CQC obedeció las ordenes del asesino, se arrodilló, le sacó las zapatillas y las medias, después comenzó a olerle, chuparle, besarle y lamerle los pies. Los pies de Carlos Retegui, talle 47, olían profundamente a Queso. A Soto Pose al principio le pareció algo asqueroso y repugnante. Pero con el correr de los segundos, le empezó a gustar, y terminó siendo una experiencia que le causo placer.
- Sos un Quesón, no hay duda.
Carlos entonces levantó el palo de hockey y golpeó en la cabeza a Soto Pose, fueron dos, tres, cuatro, cinco golpes. La siguió golpeando una y otra vez. Le puso el palo en el culo, empalándola. Y con eso dio por concluido el asesinato. La sangre fluía por todos lados. Soto Pose había sido asesinada y el Carlos Retegui entonces tomó el Queso, y lo tiro sobre el cadáver de su víctima diciendo en voz alta:
- Queso.
Con total frialdad e impunidad, el asesino se retiró de la escena del crimen.
me gustan los cuentos quesones pero este es muy pelotudo
ResponderBorrarsiguen amasijando a los de CQC ojala pronto le llegue el turno a Andy Kuznetsoff y a Juan Di Natale, y que Ravelia Zamas se encargue de Mario Pergolini, a balazos
ResponderBorrarPodría haberse aprovechado, ya que Martina estaba entregada y fuera de sí, pero fue efectivo. Sobre todo por ese detalle del empalamiento estilo hockey.
ResponderBorrarY Carlos Retegui merecía una intervención más.