La Asesina de Marco Van Basten
Poco tiempo despues de haber asesinado a Charles Walrant y a Charles Jennings, Carlota Monzón, conocida por todos como Ravelia la Quesona Asesina, se encontraba de vacaciones en Europa y ya sabemos que sí la asesina esta libre, es como un animal depredador, ansiosa por asesinar a algún hombre, claro que ella no es precisamente una asesina que asesine a cualquier tipo que ande por ahí, sino todo lo contrario, le apetecen los hombres altos y patones, en especial los deportistas famosos, y muchas veces también los modelos.
Caminando por las calles de Amsterdam, sí en los Países Bajos, país famoso por sus Quesos, Ravelia estaba segura que iba a encontrar a alguien para asesinar. Aunque nunca ganen un Mundial (tres finales perdidas), aunque de vez en cuando se suelen quedar afuera de los Mundiales (2002 y 2018 por ejemplo), no cabe duda que los Países Bajos es una tierra que dio tantos grandes futbolistas, y Ravelia estaba segura que algo tenía que encontrar.
Y así fue, caminando por Amsterdam, a un par de cuadras de la Plaza Dam y de la famosa Zona Roja, de repente, vio ante ella nada más ni nada menos que a Marco Van Basten, sí, el famoso goleador holandés del Milán, figura de la Euro 1988 (el único título de la Naranja Mecánica) y que asomaba como gran figura en Italia 1990, aunque despues no pasó nada en ese Mundial.
- ¡Marco Van Basten! – exclamó Ravelia al ver frente a ella a ese futbolista, de un gran porte físico, con su 1,88 metro y su calzado número cuarenta y siete.
Ravelia prácticamente se tiró encima de Van Basten, que se sintió acosada, el holandés no entendía nada, creía que alguna chica de la zona roja lo estaba acosando.
- Wie ben jij? wat wil je baby? – exclamó Van Basten, que en holandés significa “Quien sos, que queres, nena?
Ravelia, que no sabe una sola palabra en nederlandes, le dijo, en castellano:
- Recuerdo las figuritas de Italia 1990, las guarde por siempre, y me calentabas mucho Marco, vos, y los dos negros, Ruud Gullit y Frank Van Rijkaard, quería tener sexo con alguno de los tres, o con los tres juntos, sos hermoso, Marco, como decimos en mi tierra, Marco, sos un churro barbaro. Dale decime, porque si nacistes como Marcel, todos te llaman Marco, nunca entendí eso, quiero que me cojas Marco.
Van Basten no entendio un carajo, sabía italiano, pues había jugado en el Milán, pero absolutamente nada de español, y menos el español bien argentino que hablaba Ravelia. Pero aún sin entender nada, Van Basten le sonrío a Ravelia, y la tomó del brazo.
- Come with me – (Ven conmigo) le dijo ahora, en inglés, pensando que Ravelia lo entendería.
- Sex, i want sex with you – dijo Ravelia.
Mientras caminaban juntos, pasaron por una tienda de Quesos, famosas y características en toda Amsterdam. Ravelia le hizo señas y Van Basten ahora entendió: entraron y compraron un Queso Maasdam. Finalmente se fueron juntos en un auto, a una casa de las afueras, bastante alejada del centro de Amsterdam, aunque muy cercana al estadio de Amsterdam Arena.
Entraron juntos en la casa, dejaron el Queso sobre la mesa, y Ravelia le ofreció a Van Basten un auténtico streap tease, mientras sonaba música típica de los Países Bajos, como el tema “Tulpet uit Amsterdam”. Ninguno entendía el idioma del otro pero los dos hablaban el idioma universal del sexo. Desnuda, con solo el par de guantes negros en sus manos, como única prenda, Ravelia fue desvistiendo de a poco a Van Basten, hasta dejarlo totalmente desnudo.
El futbolista se tiró entonces a la cama, y Ravelia empezó a hacerle cosquillas en los pies, despues cosquillas y chupadas en todo el cuerpo, incluyendo la pija, con una fellatio más que larga e intensa, Ravelia le olió, chupó, lamió y besó los pies, con gran intensidad, lo disfrutó mucho, Van Basten olía a Queso, debió llamarse Charles o Karel, no Marco ni Marcel, pero bueno, así le habían puesto los viejos, y después el holandés le dio flor de cogida, espectacular, como si le hubiera convertido decenas de goles jugando para el Milán de Arrigo Sacchi.
Van Basten quedó agotado, pero le había dado una enorme felicidad a Ravelia, y quizás por el estado de agotamiento y cansancio en que estaba, no se dio cuenta que la rubia agarró sacó un enorme cuchillo de sus pertenencias, pero no era un cuchillo cualquiera, un cuchillo común y silvestre, era un cuchillo holandés, especial para cortar Queso, un Dutch Knife Cheese.
Al ver a Ravelia con el Ducth Knife Cheese, Van Basten, no se hizo problema alguno, pues creyó que la rubia iba a cortar el Queso con ese cuchillo, y ella tomó el Queso y lo tiró sobre Van Basten, se tiró sobre el y empezó a cortar el Queso, todo parecía muy romántico, le metió un dado de Queso en la boca y a Van Basten eso le encantó mucho, el holandés estaba saboreando ese delicioso Queso Maasdam, cuando no se dio cuenta que Ravelia enarboló el cuchillo, y se tiró sobre el, con furia y salvajismo.
- ¡Aaaaaaajjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjj! – gritó de terror Marco Van Basten, escupiendo el Queso, mientras recibía la primera puñalada, y así Ravelia lo siguió apuñalando salvajemente, hasta propinarle unas cuarenta y siete puñaladas.
Con el cadáver de Van Basten apuñalado y bañado en sangre, Ravelia tomó el Queso, el mismo Queso que el futbolista había comprado apenas una hora y media antes.
- Queso – dijo Ravelia mientras tiraba el Queso sobre el cadáver de Van Basten.
Con total frialdad e impunidad, sabiendo que dejaría los Países Bajos en las horas siguientes, la asesina se fue del lugar, no sin deseos por cierto, de apuñalar a Ruud Gullit y a Frank Rikjaard, y completar así su trilogía holandesa, o bien asesinar a Ruud Van Nistelroy, otro Queso holandés más que apetecible para los gustos de la Quesona. ¿Porqué no? Si al fin y al cabo es una asesina que siempre tira los Quesos que se propone, al fin y al cabo es la Quesona.
lo quesoneo como se quesonea a un queso holandes
ResponderBorrarBuen relato, despues de algunas semanas de silencio, como siempre la Quesona nos ofrece lo mejor de ella y ahora parece que se dedica a asesinar futbolistas de otras décadas y de otros países, tendremos acaso "La asesina de Ronaldo" o "la asesina de Zinedine Zidane"
ResponderBorrarLas historias estan buenas, pero no es verosimil que una asesina vaya por el mundo asesinando hombres y que nunca la descubran, yo tengo la teoría que en realidad toda la saga de Ravelia la Quesona, son las fantasías de una chica (¿la tatuada tal vez?) que se imagina cogiendo con estos hombres y asesinándolos, una suerte de sublimación sexual
ResponderBorrarBien por la Quesona, bien por este relato y pobre Van Basten, pero mejor que vuelvan los Carlos asesinando a las minas y tirando Quesos, los relatos de Ravelia estan buenos, pero creo que ya es una saga muy gastada, que tenga que asesinar a tipos de afuera ya lo dice todo
ResponderBorrarENCIMA QUE NUNCA GANAN UN MUNDIAL LE MATAS A UNA FIGURA HISTORICA, YA NO ES LA NARANJA MECANICA, ES LA NARANJA QUESONEADA
ResponderBorrarSorpresa, que-sorpresa, esperaba el regreso de los relatos con algún Carlos amasijando a una mina, y me encuentro con "la asesina de Marco Van Basten", se nota que Ravelia le tenía ganas al holandés
ResponderBorrarEl primer relato de mayo. Y de una quesona.
ResponderBorrarRavelia no se dio cuenta de hablar en italiano, ya se conto en El asesino de Kate Moss, que Ravelia habla el italiano, tan bien como la verdadera Valeria Mazza. Y sabiendo hablar en dialectos.
Pero no hizo falta. Y que letal que fue.
Noto que hubo comentario femenino. ¿No querrá ser un personaje de un relato, sin ser quesoneada, por supuesto?
Ravelia podría ser La asesina de Sebastián Yatra.
Tener que comentar como anónimo. Que fastidio.
El Fauno
Y alguna sacrificada quesona podría ser La asesina de Dario Barassi. Y alguna otra, tal vez la misma, La asesina de Alfredo Casero, si no se muere ante de tanta ira.
usa una cuenta de google o pone "seleccionar perfil" y despues "nombre /Url" y ahí pones el nombre para no salir como anónimo, ja, ja, saludos!
BorrarLo probé, tengo una cuenta. Y no funciona.
BorrarEl Fauno
Propongo El asesino de Rosalía.
ResponderBorrarHace nuevo flamenco, así que llamaría la atención de la Marquesa de Ávila, que enviaría a un quesón con ella.
Y el quesón actuaría frente al público, cuando interprete Motomami.
https://www.youtube.com/watch?v=EslzthDFm2w
La manipularía con su influjo quesón. Rosalia tendría sexo desenfrenado con que quesón. Y tal vez con la Marquesa, quien ha demostrado ser bisexual, en El asesino de Eugenia Ritó
Y luego, queeeso. ¿Sería vampirizada, embalsamada o clonada? Queda a criterio de la Marquesa.
El asesino podría ser Carlos Bernal.
El Fauno
un gran homenaje al Reino de los Países Bajos y sus quesos, un detalle: Van Basten sería el único quesoneado que compró su propio queso
ResponderBorrarpobre Van Basten, como que el autor le tenía ganas
ResponderBorraryo creo que deberían incorporarse nuevos asesinos, los Matías, las víctimas de Carla Romanini, que asesinen tanto hombres como mujeres, que no tiren quesos, sino pizzas, que tal?
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