La Asesina de El Fauno
La
historia que se contará se relaciona con el streaming de las cosplayers de
Mortal Kombat (1), en la Unidad Charlotte Corday. Las tres cosplayer
se alojaron en un gran hotel, deslumbrando con su belleza, Y con estilo de
mujeres peligrosas. Una combinación irresistible.
Carly
Baker, la cosplayer que interpretaba a la rubia y aguerrida Sonya Blade, era la
más irresistible de los tres, para el empleado del hotel que le llevaba las
valijas.
Y
ella lo notó en la forma en era mirada. .
-Mirar
de esa manera a esa mujer puede ser considerado acoso, en algunas partes del
mundo.
Carly
Baker usaba una aplicación para traducir. Que había bajado en lugar de Peligro
Queso, que le parecía poco eficiente.
-Pero
yo no soy como otras. Me llamo Carly, soy como una Caaarla.
-Y
además, sos Sonya Blade. La rubia que asesina con un beso.
-Así
que te gustaría morir con un beso. ¿Cómo te llamás?
-No
soy importante pero me conocen como El Fauno.
Carly
Baker recordó que había rumores sobre un empleado del hotel, conocido como El
Fauno. Y una idea le fue surgiendo.
-¿El
Fauno? Acércate a mí, que te asesino con un beso.
El
Fauno le partió la boca de un beso. Y hasta sus manos exploraron el cuerpo de
la cosplayer, vestida como Sonya Blade, la versión militar de cuero, de MK9.
-Que
atrevido sos, Fauno. Sólo te ofrecí un beso.
Carly
estaba más provocativa que ofendida.
-¿No
tenés miedo de que te asesine, como hacen esas chicas locas? Soy
Carly, soy como una Caaaarla.
-Estoy
protegido. Conozco a esas mujeres que son nobles por casamiento, no por origen.
Y tienen prohibido asesinarme.
-Bueno,
pero no me arruines la fantasía de que soy Sonya Blade. Yo soy mala, muy mala.
-No,
Sonya Blade. Vos sos buena y valiente. El malo soy yo. Y soy un fauno.
La
rubia se puso en pose sexy.
-¿Que
planes tenés con Sonya Blade?
-Ella
me ataca.
Carly
improvisó algunos movimientos, de supuesto ataque, como en el video promocional
de MK9.
-Pero
uso mi poder. Despierto sus deseos. Y la tengo en mi poder.
La
rubia le siguió el juego, actuando que suplicaba que no le hicieran nada-
-Sonya
no suplicó dijo que no se saldrá con sus planes. Pero él le tapó la boca...con
un beso.
La
rubia lo besó apasionadamente.
-¿Qué
me pasa? No funciona mi beso mortal-
-Estás
en mi poder, Sonya Blade. Y ahora vas a quitarte tu uniforme de guerrera.
La
rubia hizo un sugestivo strip tease. No dejó que su fan se acercara, hasta
quedar desnuda, salvo por los guantes, dato de vital importancia. Y
algún accesorio.
-Me
la vas a pagar, maldito -dijo la rubia, en tono sexy sensual- Mientras era
llevada a la cama. El fauno pasó a masajear los senos, a succionarlos. A
penetrarla por la vagina. Y darla vuelta, para meterle el miembro viril, con
todo.
-Dame
más. Te odio, aliado del mal. Pero dame más-
Carly
Baker, cabalgó sobre su fan.
-Soy
una Carlaaaaaaa, y soy muy mala como toda Carlaaaaaaa -
Carly
Baker estaba satisfecha. Pero sintió que faltaba algo más. Y vio sus guantes.
-Decíme-
¿Vos sos el escribe esas fantfictions?
-Me
gusta leerlas, son tan morbosas.
-¿Te
parece bien que asesinan a esas chicas? -preguntó la rubia, con ritmo más
lento, pero manteniendo el sexo con su fan-
-Que
pregunta rara. ¿No sos una Carla?
Y
entonces, Carly Baker sacó una cuerda de los guantes, al estilo de
Sonya Blade. La extendió, Y sin dejar de tener sexo, estranguló a su
amante.
.¿Te
gustan las fatalities de Sonya Blade? -dijo aflojando un poco la cuerda-
Disfrutá esta, Fauno.
-Yo
no soy...
La
rubia no quiso escuchar. Y apretó con todo.
Silencio.
Carly Baker había sido letal, tan letal como su personaje.
-El
Fauno. ¡Queso!
Y
arrojó un Queso sobre el cadáver de El Fauno. O eso creyó la cosplayer.
Una
media hora después, en otro lugar.
Un
cuarteto de Santillanas, clones de María Laura Santillán, asesinada en Nublar,
estaba en lo que podría llamarse un curso de masaje. Una de ellas era la
instructora.
-¡No!
Eso está muy muy mal.
-Pero
a mí me gusta-contestaron la segunda y tercera Santillana, masajista y la
masajeada.
-Y
a mí también- dijo la cuarta Santillana, que estaba siendo masajeada por... El
Fauno.
Sí,
El Fauno estaba muy vivo, contradiciendo todo lo que se ha contado.
-La
están pasando bien. A la señorita la está atendiendo nuestro amigo. Y me
dejaron afuera. .
En
eso, sonó un teléfono. Interrumpiendo la queja de la líder.
-Lara,
¿sos vos? Sí, está con nosotras. Está bien, te doy con él.
La
Santillana le alcanzó el celular al Fauno.
-Atendé.
Es tu amiga bajista.
-Hola,
Lara. Sí. soy yo. Estoy con las Santillanas, creo que ya las conociste.
Pasó
que me mandaron para hacer un curso de masajes. ¿En serio pasó eso?
¿Y me ibas a hacer un recital homenaje?
-Huy,
no. Ahora le va a cantar una canción. -comentó la Santillana líder
del cuarteto a las demás- Y él se va a olvidar de nosotras.
Para
explicar lo que pasó, hay que retroceder unas horas. Cuando se preparaba el
espectáculo en la Ahora le va a cantar una canción. Unidad Charlotte Cprday.
Astrid estaba molesta porque la habían dejado de lado, siendo la anfitriona.
-¿Ustedes
confían en ese amante de ninfas?
-¿El
Fauno? -preguntó Lady Dumitrescu- Te prohíbo hablar mal del Fauno.
-Fue
muy bueno conmigo -acotó La Marquesa de Avila- Me salvó y luego...
-Ustedes
son malas como yo. Pero un par de palabras amables, que la llamen la Lady.,
Carmencita- Y se ablandan, confían en cualquiera.
-Pero
es tan confiable -insistió la Lady- Y hasta me defendió ante Leia.
-
Pero, ¿confían en las cosplayers? Una se llama Carly, es como una
Carla. Imaginen si se quiere quesonear a ese amigo de ustedes.
A a
Lady y la Marquesa les disgustó la idea. Y decidieron enviar lejos a
El Fauno, con algún pretexto.
-...Y
Astrid tuvo razón. -explicaba Lady Dumitrescu a un grupo de Carlas, tanto
quesonas activas como aspirantes a serlo- Un empleado se hizo pasar por el
Fauno, para impresionar a Carly Baker. Y esta lo quesoneó, aun sabiendo que
tenía protección como muggle influyente.
-Y
por eso la quesonearon -dijo Carla Conte- Aunque era una de nosotras. Ahora ni
siquiera podemos confiar en las nuestras.
-Tienen
que recordar que no deben portarse mal, aunque sean Carlas.
Y así es como termina la historia, que explica que Carly Bake, una potencial quesona, fue quesoneada, en el episodio conocido como Los asesinos de las cosplayers de Mortal Kombat.
(1)
https://cuentossangrientos.blogspot.com/2021/03/mortalqueso-los-asesinos-de-las.html
JAJAJAJA AHORA "LA ASESINA DE FUTBOLERO VELEZ" CON CARLA ROMANINI, AUNQUE YO SOY JUAN, NO MATÍAS, JAJAJAJA
ResponderBorrarel propio Fauno conto la historia de su asesinato? pero al final era uno igual? me gusto el relato, tiene sus cosas, es diferente de los quesos habituales
ResponderBorrardebería haberlo estrangulado mientras la penetraba, como un juego sexual, y despues el queso
ResponderBorrarun interesante y acertado aporte de El Fauno explicando algo sobre un relato, debería haber más precuelas, spin off y secuelas, celebro este aporte
ResponderBorrarcongratulations a El Fauno por la historia, pero yo no quiero escribir ni leer "la asesina de Paul Toombes", y prefiero no probar el queso por ahora...
ResponderBorrarMe gusta esto, un fan de los cuentos escribe su propio asesinato, aunque despues no era el, pero bueno no importa, el autor del blog confiesa ser un asesino y describe como acuchilló a una mina, esto se pone cada vez más interesante
ResponderBorrarYo no se escribir un cuento, si propongo algún relato que ya se sugirió, la venganza de los hijos de Valeria Mazza contra Carlos Delfino, no se como puede ser, y seguro que va a terminar ganando Carlos Delfino, y algo de Maru Sandes, cometiendo algún crimen, quizás en defensa de su esposo, el gran asesino de las patas gigantes y mal olientas, Carlos Matías Sandes
ResponderBorrarBuenas ideas. Maru Sandes podría dejar al borde de la muerte., tal vez en defensa propia, a un famoso.
BorrarY entonces, llegar una Carla al rescate. Y tiene sexo con el famoso, para curar sus heridas, para que el ritual sea realizado por una Carla. Quien le tiraría el queso.
Los hijos de Valeria Mazza, podría ser un relato de venganza fallida.
Tiene muchas posibilidades, podría intentar algo contra Delfino. O raptar a Ravelia Zamas, quedando paralizados por el parecido. Y llega la Ravelia tatuada.
este relato de El Fauno esta bueno, un aporte fundamental al Mundo Quesón
ResponderBorrar"la asesina de El Fauno" el título es bastante tenebroso, pense "pobre Fauno" pero despues el cuento esta bastante bueno, y que bien la pasa el Fauno, y como lo protegen!
ResponderBorrarQuedó muy bien el relato, subido al blog. Y parece que gustó.
ResponderBorrarNo está mal que se agreguen relatos derivados, precuelas, spin off.
Y algunas secuelas, con venganzas fallidas.
Podría ser La asesina de Futbolero Vélez, que tenga sexo con Carla Romanini. Y que la quesona rubia sea detenida a último momento. Y reciba una reprimenda. La quesona rubia deben continuar.
O que haya sido inhbida, para proteger a un destacado comentarista.
¿Cuál será el próximo relato?
ResponderBorrar¿alguna mina buena que reciba un gran Queso de algún Carlos?
Borrar¿pero quien? ¿el Quesón y la Quesoneada?
Hay un par, incluso hay bastantes que todavía no tuvieron su relato.
BorrarCecilia Oviedo
https://bonitasargentasydelmundo.blogspot.com/2020/08/ceci-oviedo-quien-no-le-gusta.html?m=0
Con la complicidad de Marcia Bogani, la morocha que parece sujetarla en una de las fotos. Y cambio de eso...ser quesoneada también.
Podría suceder en la Unidad Charlotte Corday. Y con un Carlos estrangulador, sino con uno menos sutil.
Lorna Paz, colombiana, hermana de Angie Cepeda. Y antagonista de Betty la Fea (Ana María Orozco fue quesoneada). No faltan Carlos colombianos.
María del Mar, una de las ex de Matías Alé. Se encontraría con Carlos Stroker, tendrían sexo en la playa, con intensidad. Stroker aprovecharía la suba de la marea, para sumergirla bajo el agua. Y que así se ahoge.
Como una escena de Into the Night, película de los 80, con Jeff Goldblum y Michelle Pfeiffer.
Y así Carlos Stroker quesonearía una vez más, sin usar armas.
yo me imagino sentado a Carlos Quesón en el teclado y pensando: ¿A quien tirarle un Queso en un nuevo relato?
ResponderBorrarnecesito un cuento de Carla Romanini, que amasije a Matías Lammens
ResponderBorrarEl cronista no suele meterse con la política.
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