Sangre y Queso (Parte 1 de 3)
Carolina Baldini, ex mujer de Diego “el Cholo” Simeone, se sorprendió aquella tarde cuando recibió aquel extraño llamado.
- Buenas Tardes, ¿Habló con la Señora Carolina Baldini? – era una voz femenina, muy española, como de cantante de flamenco, ¿Alguna nueva novia del Cholo originaria de la muy castiza ciudad de Madrid?
- Sí, soy yo – contestó Baldini.
- Yo soy la Marquesa de Avila – contestó la voz femenina – quizás mi nombre no le dice nada, seguramente no lo diga nada, pero le preguntó, ¿Está dispuesta a reunirse de nuevo con las Jau Match?
- ¿Las Jau Macht? – preguntó sorprendida Carolina Baldini – Hacia muchos años que no escuchaba nada de ese grupo.
- Me lo imaginaba – dijo la Marquesa de Avila con naturalidad – Es que estamos haciendo un homenaje a grupejos olvidados de chicas, las Jau Match, las Saracatunga de Nico Repetto, las chicas Rompeportones y Petardos, las que están vivas claro, ya sabe que algunos han sido asesinadas.
- ¿Esto es en serio o es una broma? – preguntó Baldini, que tuvo la tentaión de cortar el celular, pero era tanta la curiosidad que sentía que seguía hablando.
- Esto es muy serio, tan serio como que soy la Marquesa de Avila – dijo la Marquesa de Avila, elevando el tono de la voz.
- Mire Marquesa o como se llame hace rato que mi vida nada tiene que ver con las Jau Match – dijo en forma cortante Baldini – y la verdad que me había olvidado de aquellos años.
- Le digo que este tributo no es gratuito, formó parte de una productora de cine, y queremos filmar un largometraje musical, dirigido por don Alfredo Jichcock, y obviamente su participación en el corto será muy bien pagada. Le podríamos hasta cantar “La Bien Paga”, uno de mis grandes éxitos musicales.
- ¿Alfredo Jichcock? Nunca me imaginé que un director de su prestigio me pudiera tener en cuenta.
- ¿Quiere venir al casting en la Piruli Filmes? Solo por hacer el casting le pagamos 500 euros, más gastos de viáticos y viandas alimenticias. Se trata de una prueba, usted decide.
CAPÍTULO 2 “LA CONVOCATORIA”
Así fue que la ex mujer de Diego Simeone se hizo presente al día siguiente, a primera hora, en los Estudios de la Piruli Filmes. Baldini fue la primera en llegar, la Marquesa de Avila fue quien la recibió.
- Buenos días mi niña salerosa – le dijo la Marquesa.
- ¿Nos conocemos del tiempo en que vivía en Madrid con el Cholo?
- Puede ser, puede ser, en España soy una cantante muy popular – dijo la Marquesa – en seguida llegaran las demás convocadas.
Baldini se sentó en una especie de teatro, con muchas butacas que veía a un escenario, todo improvisado, pues era una carpeta. Comenzaron a llegar las demás convocadas. Entraron otras integrantes de aquellas Jau Match noventosas. Estamos hablando de Fabiana Donato, Catalina Vidal, Monica Voljin, Luciana Zulueta, Gabriela Frezotti, Gabriela Rubí, Sabrina Adamovsky, una por una fueron entrando. Quizás sus nombres no digan nada, pero animaban aquellos domingos de “Hacelo por Mï” cuando Mario Pergolini intentaba hacerle competencia a Marcelo Tinelli que por entonces hacía “Ritmo de la Noche”.
Baldini las veía con un aire de superioridad a las demás Jaumatch, en actitud sobradora, como diciendo “vieron pelotudas, yo me case con un futbolista de renombre, figura de la selección nacional, me fui a vivir a Europa, ustedes debieron sobrevivir con puteríos y cosas por el estilo”.
Las JauMatch no eran las únicas que llegaron a ese especie de teatro, también se hicieron presentes las “Saracatunga”, las que estaban en los Sabados Bus de Nicolás Repetto, Gabriela Neyrotte, Valeria Narváez (Björk), Daniela Viaggiamari, Petu, Fernanda Torresi, Marina Gnappi, María José Alvarez Franco, Romina Propato, María Celeste Puente, Laura Winter, Yesica García, Andrea Contreras, Daniela Zelaya y Analía González, muchas nombres…
Y para completar el panorama otras cuatro minas Alejandra Mora, Dana Fleyser y Paula Martínez, de las líneas de Rompeportones, y Alessandra “la Sueca” Larsson, una por una fueron entrando.
CAPÍTULO 3 “EL HECHIZO”
En un costado se encontraba Lady Dumitrescu, nuestra heroína rumana, y la Marquesa de Avila, viendo a las integrantes, en eso apareció el prestigioso director Alfredo Jichcock.
- Todo bien mis amigas – dijo Jichcock – pero estas mujeres ya son veteranas, algunas ya tienen como cincuenta, la mayoría pasó los cuarenta, eran chicas trolas y putas en 1992, pero ahora estamos en 2019.
- Je, je, je – Lady Dumitrescu realizó su típica sonrisa socorrona – parece que todavía no nos conoce Alfredo, mucho “Frenesí”, “Extraños en un Tren” y “El Hombre que sabía demasiado”, pero aún le faltan algunas materias.
Dumitrescu extrajo una varita mágica, comprada en Ollivander’s, la misma tienda donde las compraba Harry Potter, Jichcock la miró asombrada y le dijo:
- No sabía que era egresada de Hogwarts.
- No lo soy, yo soy de Durmstrang, la escuela de magia y hechicería europea más importante al este de Roma y Berlín.
Dumitrescu, que tenía una apariencia de una mujer joven repleta de energía de unos treinta años, levanto aquella varita y exclamó en voz alta:
- Accio. Expelliarmus. Wingardium Leviosa. Espectro Patronum.
La luz se oscureció, entonces Dumitrescu, aún más fuerte, exclamó nuevamente:
- Accio. Expelliarmus. Wingardium Leviosa. Espectro Patronum.
La oscuridad fue total, Dumitrescu, ya gritando, volvió a decir:
- Accio. Expelliarmus. Wingardium Leviosa. Espectro Patronum.
Volvió la luz. Baldini y las demás se encontraron que tenían otra vez la juventud y apariencia de épocas pasadas.
- No puede ser – dijo Baldini – estoy igual que en 1992, cuando hacía las JauMatch.
Las demás mujeres también se asombraron. Las Saracatunga estaban como en la época de Sabado Bus, las ex Rompeportones como cuando hacían ese programa. Hasta la Sueca Larsson estaba como en 2014, su mejor momento.
- Extraordinario – dijo Jichcock - ¿Cómo lo hizo Dumitrescu?
- Fue magia de alta hechicería, solo pocos magos pueden hacerlo, de hecho Dumitrescu es la única mujer – dijo la Marquesa de Avila – los demás son todos hombres, Harry Potter, Albus Dumbledore y usted ya sabe quien, el que no debe ser nombrado.
- ¡Voldemort! – dijo Jichcock.
- ¡Shhhhhhhhhh! – dijo la Marquesa - ¡Dije que no lo nombre!
- ¿Pero donde esta Dumitrescu? – dijo Jichcock.
- Le dije que era magia de alta hechicería, y esa clase de magia tiene un precio. Mírela a Lady Dumitrescu.
Jichcock giró la cabeza y vio a Dumitrescu, tumbada en el piso, desvanecida, ya no era la mujer jovial y enérgica de treinta años, ahora era otra vez una anciana consumida, como de trescientos años. Parecía Gollum, el personaje del Señor de los Anillos, el que decía siempre “Mi precioso” o “Mi tesoro” (depende de la traducción).
- Todo sea por el éxito de la filmación – dijo Dumitrescu balbuceando – ya recuperaré.
CAPÍTULO 4 “LA ASAMBLEA”
El Director de Cine salió entonces al escenario. Las minas lo vivaron, Larsson, la sueca, se paró y dijo:
- Hablo en representación de todas mis compañeras – con acento escandinavo por supuesto – no sabemos como lo hizo pero le agradecemos que lo haya hecho, nos dio la juventud perdida. Trabajaremos gratis para usted.
- Eso decilo por vos – gritó Baldini – yo gratis no trabajo.
- Lo votaremos – dijo una de las Saracatunga – lo decidimos en asamblea. Levanten las manos quien agradece ser otra vez jóvenes y pagar esta deuda perpetua con el señor Jichcock, trabajando gratis para el en la filmación.
Todas, menos Baldini, levantaron las manos.
- El pueblo ya decidió – dijo la sueca Larsson.
Baldini quedó masticando bronca, no podía creer que todas la demás se vendieran así, al mejor postor, decidió irse, pero se quedó sentada por respeto a Jichcock. El Director de Cine comenzó a hablar.
- La idea es hacer una película musical al estilo de Hollywood de los años 40 o 50, aunque puede terminar con una invasión de aves como “Los Pájaros”, je, je, o algún asesinato en la ducha como en “Psicosis”, o quizás una rubia enigmática como en “Vertigo”, o alguien sospechoso de querer asesinar a su esposa como en “Sospecha”, o un asesinato en un parque como “Quien mató en Harry?”…
- Bueno, señor Jichcock, no cité su filmografía – dijo la sueca Larsson – ya la conocemos, o al menos yo que vengo de Suecia, tierra de grandes directores como Ingmar Bergman, sí seguramente las demás no sepan mucho de cine, hable de esta película.
- Es un film como aquellos musicales de Hollywood de los años 40 y 50, con mucho baile, música, ambientado en un campo de concentración nazi, demostrando que aún en el horror puede haber magia y color, por eso, todos juntos nos trasladaremos a la Unidad Penal Charlotte Corday, dirigida por Fraulein Breitner, una unidad penal igual a aquellos campos de la muerte. La cosa es así: un grupo de prostitutas participan en un show de cabaret en la Francia Ocupada con la presencia del propio Hitler, pero como al Führer no le gustó, las meten en un campo de concentración. Usted Larsson será oficial de las SS.
- Perfecto – dijo Larsson - ¿Cuándo partimos a la filmación?
Parece que se viene todo a lo grande. Y le dieron a La Sueca el papel que se merecía. Otra vez nuestra Lady necesitará el rejuvenecer, lo que anuncia algo sangriento.
ResponderBorrarEs un principio muy prometedor.
Bien la Marquesa como una manipuladora.